Con los ojos helados
| Autor | Alejandra Benítez |
Mal inicio para el técnico Enrique Meza en el arranque de las eliminatorias mundialistas rumbo a Japón-Corea 2002 pues luego de que la Selección Mexicana cayera por 2-0 ante su similar de Estados Unidos en Columbus, Ohio, muchas dudas vuelven a surgir con relación al manejo del Tricolor pues además de que el equipo se mostró sin creatividad en el medio campo, su actitud está muy lejos de la que antaño tuvieron otros representativos.
El estratega inició el encuentro con una línea de tres defensas integrada por Claudio Suárez, Alberto Macías y Rafael Márquez, en el mediocampo colocó a Germán Villa y Pável Pardo, dejando en las laterales a Marco Antonio Ruiz y Salvador Carmona.
En el ataque ubicó a Braulio Luna, Francisco Palencia y Luis Hernández. Sin embargo su planteamiento inicial arrojó poco futbol y una nula ofensiva, dejando ver que esta combinación no es la idónea para manejar a una Selección que busca la propuesta y la ofensividad.
Incluso el acercamiento más peligroso que se dio en los primeros 45 minutos corrió a cargo de los defensas Suárez y Márquez quienes hilvanaron una jugada aérea en territorio estadounidense.
Hernández se vio muy solo en la delantera y no pudo encontrar la química ni con Palencia ni con Luna, quien a pesar de buscar variantes no pudo penetrar la cerrada defensa del equipo de casa, quien aplicó bien el achique y la marcación por zona.
Este planteamiento también dejó claro que hizo falta un hombre de otras características en la media cancha pues México no contó con alguien que pudiera hilvanar entre la defensa y la delantera, lo cual no es privativo del momento actual que vive la Selección, sino de la falta de hombres de talento en el mediocampo, los cuales generalmente son extranjeros.
Al Tricolor le hizo falta aquella unión y coraje que mostraron para defender su intimidad, tal y como lo hicieron hace unas semanas cuando optaron por guardar silencio y no dar entrevistas a los medios de comunicación.
La lluvia de criticas ha sido intensa, pero si en otras ocasiones los directivos del futbol se han dejado llevar por las vísceras para efectuar cambios en la Selección, la pregunta es si en esta ocasión lo indicado es pugnar por la continuidad o sacrificarán a un entrenador más, en busca de modificar algo que está dentro de los mismos integrantes del Tricolor, que es el aprender a trabajar en equipo y dejar atrás las influencias de los líderes negativos.
Debajo del promedio
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