PLAZA PÚBLICA / Legisladores ante la Iniciativa Mérida

AutorMiguel Ángel Granados Chapa

La Comisión Permanente del Congreso propuso anteayer a los legisladores mexicanos que mañana y pasado acudirán a la reunión interparlamentaria con sus homólogos norteamericanos que promuevan una estrategia bilateral de combate al narcotráfico. En la misma línea que el gobierno federal, senadores y diputados rechazaron los condicionantes que en ambas Cámaras del Capitolio acompañan a la asignación de 350 o 400 millones de dólares a la Iniciativa Mérida (presentada por el presidente Felipe Calderón al presidente George W. Bush), por provenir de una actitud unilateral y por ello inadmisible.

Es el segundo año en que la Iniciativa Mérida aparece en un sitio preponderante en la agenda del encuentro entre legisladores de ambos países, que ahora se reúnen en Monterrey. En la anterior junta, la número 46 celebrada en Austin, en realidad el tema no estaba previsto, pero fue abordado porque la delegación norteamericana lo expuso ante la sorpresa y perplejidad de los mexicanos, carentes de la información con que contaba su contraparte.

El diputado Silvestre Reyes, presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, presentó el tema con la naturalidad de quien lo conoce como materia propia, no obstante que en México sólo se conocían algunos esbozos derivados del encuentro de marzo anterior entre los dos mandatarios en la capital yucateca, de donde derivó el nombre del proyecto de cooperación bilateral, para eludir la comparación y las descalificaciones que fulminarían al Plan México (su denominación original) por la obligada referencia al Plan Colombia.

Tanto Reyes como su colega Jerry Weller anticiparon el contenido de la iniciativa, delineando que se trataba de ofrecer aportaciones financieras a México para la modernización de sus recursos técnicos e informáticos, y de formación de cuerpos policiales capaces de frenar el auge del comercio de drogas entre los dos países. Ni entonces ni ahora los legisladores mexicanos parecieron interesarse en el proyecto, acaso por juzgar erróneamente que se trataba de un asunto del resorte del Poder Ejecutivo, en que sólo entraría el Senado en el caso de implicar un tratado o documento similar entre los dos países.

De modo que a partir de octubre pasado los legisladores norteamericanos han trabajado en el tema a diferencia de los mexicanos, que sólo anteayer volvieron los ojos al asunto, arrastrados por las circunstancias. En las dos Cámaras, al estudiar la ampliación del presupuesto de guerra en...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR