Papás a tres tiempos
| Autor | Yazmín Gallegos |
La paternidad puede verse como un menú a tres tiempos, donde los primerizos gozan de una suculenta entrada, a los padres maduros les toca digerir el plato fuerte de la adolescencia y de la adultez, y a los abuelos, degustar del dulce postre que representan los nietos.
La mesa está puesta para que algunos padres en sus distintas distintas etapas hablen de cómo saborean su manjar familiar.
La entrada
José Alejandro González Leal, de 24 años con su hijo José Alejandro
"Se llama José Alejandro, no por mí, sino por su abuelito", dice el papá joven visiblemente contento al presentar a su bebé, copia fiel de sus ojos y sonrisa, antes de iniciar la sesión fotográfica.
La decisión
"Fue más bien un deseo, pues desde que tengo memoria quise ser papá y siempre estuvo en mis planes ser papá joven, aún cuando la tendencia ahora es tener bebés a los 30 años".
La juventud
Físicamente sé que tengo con Pepito la oportunidad de trepar árboles, jugar futbol, Nintendo o leer Harry Potter porque aún no estoy tan lejos de eso".
El nacimiento
"Con un sentimiento nuevo, enorme, que no se parece a nada... Feliz de tener un pedacito que está ahí sólo para que lo quieras".
Los cambios
"Tu hijo se se vuelve prioridad, aunque para mí todo siempre ha estado encaminado a la familia, yo siempre quise ser buen estudiante, ser responsable en mi casa, tener una buena relación con mi esposa, todo para poderle darle el ejemplo a mi hijo cuando existiera".
Los retos
"Inculcarle todo aquello que a mí me hizo feliz, el valor por la familia, el cariño a los abuelos, el gusto por hacer las cosas que uno quiere hacer, seguir el ideal que uno tiene".
La filosofía
"Creo que lo básico y más importante es conocer al hijo, saber en qué es bueno, qué puede hacer bien y luego buscar cómo ayudarlo dentro del camino que él escoja. Ayudarlo a ser un hombre de bien pero sin coercionar".
El plato fuerte
Carlos Huerta Solís, de 42 años, con sus hijos Carlos Gerardo, Alejandra y Maximiliano
Dice Carlos, papá de tres adolescentes, que lo mejor para entender a los hijos es acordarse de cuando él tuvo esa edad y ser más tolerante.
Los cambios de un papá de adolescentes
"Te vuelves más tolerante, comprendes que ahora ellos tienen sus propios compromisos y a veces hay que anteponerlos a los de la familia. Les tienes que dar su espacio".
Lo más difícil
"Que cada uno tiene distinta personalidad y a veces uno puede pensar que el cariño no se reparte por igual".
La disciplina
"Con reglas claras que pueden...
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