Patricia Armendáriz / El seguro de depósito y el gobierno corporativo en la banca

AutorPatricia Armendáriz

Es indudable que la multiplicidad de tipos de intermediación financiera propicia en gran medida el financiamiento para el desarrollo económico de México. Sin embargo, el impulso del mercado interno depende de manera importante del crédito a las pequeñas y medianas empresas, diseminadas a lo largo y ancho de nuestro País, por lo que el estímulo al desarrollo del sector bancario resulta tarea por demás prioritaria.

Ante esta necesidad, la reciente entrada en vigor en México de un seguro de depósito explícito, y la reducción gradual de la cobertura de dicho depósito crea una medida con resultados potenciales ambiguos.

En efecto, por un lado la creación de un seguro de depósito explícito nace principalmente de la necesidad de infundir en el mercado la disciplina de las mejores prácticas bancarias, toda vez que aquellos bancos que no las observen sufrirán la pérdida de sus depositantes que no estén cubiertos por el seguro de depósitos, que se sentirán amenazados por un eventual riesgo de insolvencia de los bancos "mal portados". Otro factor determinante de la creación de un seguro de depósito explícito es la reducción del costo de insolvencias bancarias, que en el pasado han sido absorbidos en su totalidad por el Gobierno, con consecuencias negativas para la inversión pública en sectores sociales prioritarios.

Sin embargo, en contrapartida a los beneficios mencionados, se encontraría la falta de estímulo que se produciría entre los depositantes mayores cuyos fondos continúan invertidos en la banca, posiblemente sacrificando rendimientos, pero que a cambio se encuentran aún protegidos por un seguro de depósito, mismo que al irse gradualmente disminuyendo dentro de los próximos 3 años, podría traer como consecuencia la salida de fondos del sistema bancario hacia otros intermediarios dentro y fuera del País.

Para compatibilizar la necesidad de implantar una mayor disciplina de mercado en el sector bancario con aquella de continuar impulsando su desarrollo y estimular el ahorro en el mismo, diversas medidas tendrán que tomarse para reforzar la confianza de los inversionistas bancarios que queden descubiertos. Una de ellas es sin duda un mayor fortalecimiento del gobierno corporativo de la banca.

El gobierno corporativo es necesario en cualquier empresa donde el dueño de la inversión no es la misma persona que el que la administra. Esto es porque, cuando el inversionista y el que administra los fondos firman el contrato respectivo, no hay manera que...

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