Paz en Colombia: sí o no
| Autor | Ana Gabriela Rezc |
MEDELLÍN.- Por la Calle 30 de la segunda ciudad más poblada de Colombia, un taxista discute acaloradamente con su pasaje.
Los conductores que rodean al Hyundai amarillo notan la escena y, sorprendidos por el hecho, maniobran cuantas veces sea necesario para no perderles la pista.
El plebiscito originó la discordia.
Aunque el acuerdo final para la paz entre el gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se firmó el lunes 26 de septiembre, con la presencia de 2 mil 500 invitados especiales en Cartagena de Indias, y fue aplaudido por la comunidad internacional, este domingo le corresponde al pueblo colombiano dar su opinión.
Dictamen que tiene un peso relevante en el proceso, pues medirá si los ciudadanos respaldan o no la decisión tomada por Santos.
"¿Apoya usted el acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera?", se lee en las papeletas.
Más de 34 millones de colombianos están habilitados para participar en la consulta.
Si el 13 por ciento se muestra a favor del pacto, Santos tendrá la facultad de implementar los acuerdos de paz.
Poco más de 4.5 millones de votos pueden parar la guerra que inició hace 52 años y dejó más de 220 mil muertos, miles de desa-parecidos y millones de campesinos desplazados a las ciudades.
Si gana el "No", por el contrario, se impedirá que los acuerdos se lleven a cabo.
El plebiscito resultaría consultivo y no vinculante si ninguna de las respuestas consigue el umbral de sufragios establecidos por el Congreso.
De acuerdo con la encuesta realizada por Cifras & Conceptos, publicada el 27 de septiembre, el 37 por ciento de los colombianos está totalmente decidido a ir a las urnas este 2 de octubre.
El "Sí" lograría el 62 por ciento en intención de voto en el plebiscito, según el sondeo, mientras que el "No" el 38 por ciento.
No obstante, la nación se percibe polarizada.
Están los que les importa el tema, que parecen ser minoría, y se muestran a favor o en contra, y los que les da lo mismo pues consideran que la suerte ya está echada y su punto de vista poco podrá modificar el panorama.
Pero a todos les preocupa el futuro del país.
"Lo único que quiero es que mis hijos no vivan la guerra que nos tocó a nosotros", comparte Daniela Moreno, ama de casa de 45 años de edad, quien se desplazará hasta su municipio para votar.
"Tenemos miedo de que el gobierno quede en manos de la guerrilla", comenta Katherine Salas...
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