Pelea callejera

AutorRoberto Ramírez

¿Que pasa cuando 2 buscapleitos se encuentran en la calle? ¿Y si otros peleoneros se dan cuenta? Tendríamos entonces algo así como lo ocurrido en la película de David Fincher, "Fight club", un grupo de energúmenos peleando nada más por gusto, porque nacieron para ello.

Pues así es el Audi TT RS, y así son sus rivales. Este es otro Audi que, como el R8, puede ver de frente, sin desviar la mirada, a un Porsche, en este caso al Cayman R, y su encuentro sería como el de 2 pugilistas en ceremonia de pesaje previa a una pelea, retándose: "No te tengo miedo", diría el TT RS; "Estás acabado", le advertiría el Cayman R.

Y en la lista de retadores nombres como: BMW 1M, Nissan 370 Z y Ford Mustang Shelby GT500. Todos frotándose las manos. ¿Cuál ganará? Todo depende.

En este singular y exclusivo grupo de autos deportivos el TT RS es el más refinado y el más fácil de conducir, aun con los 340 caballos de potencia de su motor L5 turbocargado en plenitud. Su tracción integral y su excelente puesta a punto ayudan a que todo el que lo maneje lo pueda dominar inmediatamente y llevarlo al extremo.

Un BMW 1M, o un Cayman R de Porsche se deben tratar con mayor respeto, ambos son potentes también, pero son de tracción trasera. Lo mismo ocurre con el 370Z de Nissan y ni se diga con el Mustang Shelby, el musculoso del grupo.

Sin duda, el más balanceado, al menos en la teoría, es el Cayman R, gracias a su configuración ideal de motor central, el clásico bóxer de Porsche, un 6 cilindros de 3.4 litros y 330 caballos de fuerza. Una delicia para manejar en pista o en carreteras plagadas de curvas. Ahí no le ganan.

El 1M de BMW es más visceral. Su corta distancia entre ejes y la brutal fuerza de su L6 Biturbo (340 hp) hacen que su comportamiento sea un tanto nervioso, proclive a deslizar el eje trasero a la menor provocación, ya sea del acelerador, o por transferencia de peso. Aún así es muy divertido al volante y sin duda será el favorito de muchos para ganar esta pelea.

Como un samurai japonés, hábil y escurridizo, pero fuerte, así es el 370Z, un digno rival para cualquiera. Porta un V6 3.7 litros naturalmente aspirado con 332 caballos bajo el cofre. Un deleite para el oído. La tracción es trasera y puede tener transmisión manual o automática.

Su punto débil son los acabados interiores, que no están a la altura del Cayman R, el 1M y menos del TT RS. De...

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