PERFILES Y RASGOS

AutorHoracio Andrade

MISTERIOSO SER HUMANO

Decía Sófocles que en el mundo hay muchas cosas misteriosas, pero que ninguna lo es tanto como el ser humano. Esta es una gran verdad; somos misteriosos porque somos complejos, de hecho enormemente complejos, al grado de que no podemos afirmar, en pleno siglo XXI, que hayamos terminado de juntar todas las piezas del rompecabezas que, quizás, nos permitirá algún día conocernos bien.

Ciertamente se ha avanzado mucho, y constantemente se hacen nuevos descubrimientos que nos acercan, poco a poco, a ver lo que hay debajo de la parte del iceberg que sale a la superficie, y que no es otra que el comportamiento. A fin de cuentas, lo que resulta más evidente de una persona, además de su físico, es la forma como actúa e interactúa.

Pero lo que origina esas pautas conductuales relativamente consistentes a las que llamamos personalidad, es un conjunto de variables que permanecen ocultas, y que interactúan unas con otras formando un sistema en el que las causas y los efectos no siguen relaciones lineales: una causa puede generar múltiples efectos, y un efecto puede provenir de un gran número de causas.

Por eso, en las organizaciones surgen preguntas que, si no se tiene una buena base conceptual, resultan muy difíciles de contestar: ¿qué hace que las personas se motiven, se comprometan y den valor agregado a su trabajo, o por el contrario, se ciñan a la ley del mínimo esfuerzo o de plano tengan un mal desempeño?; ¿por qué a algunos les resulta más fácil relacionarse con los demás y comunicarse abiertamente que a otros?; ¿qué es lo que le permite a ciertas personas lidiar mejor con el estrés y las presiones, mientras que hay a quienes esto les causa problemas físicos y emocionales?

Estas son solo unas cuantas de las muchas interrogantes a las cuales, con frecuencia, se dan respuestas simplistas y carentes de todo fundamento. Lo peor del caso es que también en función de ese desconocimiento de las bases del comportamiento humano, se toman decisiones que lo afectan negativamente, o que simplemente no producen el efecto deseado.

Ni siquiera las personas que "naturalmente" tendrían que estar más familiarizadas con este tema, las de Recursos Humanos, cuentan a menudo con la información necesaria para estarlo. Ya ni se diga los líderes formales, responsables de facilitar el buen desempeño, desarrollo y motivación de su gente.

Lo heredado y lo aprendido

En esa base oculta del iceberg de la personalidad de cualquier individuo, hay dos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR