Con piel de León

AutorRogelio Elizalde

ENVIADO

LEÓN, Guanajuato.- Esta ciudad goza de fama como destino para comprar zapatos: cuando queda de paso, muchos visitan un outlet o pasan por el mercado del centro. Esa fama se la ha ganado a pulso: 70 por ciento de la producción nacional (171 millones de pares) se hace en Guanajuato, de acuerdo con la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Guanajuato.

Esta vez, el viaje va más allá de una mera compra. Como es el material del que se hace 65 por ciento de los zapatos en México, este paseo corre, literalmente, por la piel: desde que se curte, limpia y corta hasta que pinta, diseña y cose.

La Ruta PiCaSo (piel, calzado y sombrero), como se le conoce a este recorrido guiado que se estrenó este año, es la nueva atracción de los viajeros, pero también de diseñadores y aficionados a la moda.

LOS PANZAS VERDES

La tenería Santamaría es la primera parada. Amontonadas en una pick up llegan decenas de pieles de res y cabra secadas con sal. El personal verifica su calidad y descartan las que no cumplen el estándar; cuentan las restantes.

Entrarán a enormes barriles para mezclarse con químicos que quitan el pelo. Después, a mano y sobre una piedra, se retira el restante de grasa y carne que quedó pegado a la piel.

Los curtidores terminarán pintados de verde a la altura del torso debido a los químicos, por ello son apodados panzas verdes.

"Este proceso de curtido se hace así desde hace muchas décadas, las pocas máquinas que se ocupan son antiguas medidoras de piel y tambos de madera que giran. Son raras, pero aún sobreviven en León, tenerías tradicionales", explica Jorge Santamaría, uno de los propietarios de la empresa.

DISEÑO INTERNACIONAL

La segunda escala se hace en Julio de Mucha, fábrica que produce entre mil y 5 mil zapatos diarios. Santiago de Mucha, el director general, explica cómo se siguen y anticipan las tendencias mundiales y cuáles son las favoritas de los mexicanos y los extranjeros.

Luego se recorren las instalaciones para conocer cómo se crea un zapato en cadena. Se recibe el rollo de piel, se corta en partes, se cosen (algunas a mano, otras con máquinas), se ponen las suelas y queda listo para enviarse. Algunos de sus clientes son tiendas departamentales en México y Estados Unidos. Incluso maquilan zapatos para diseñadores italianos de marcas...

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