Placeres de la élite
| Autor | Édgar Vargas |
Al hablar de la élite del atletismo mundial se pensaría que su alimentación es sumamente estricta y específicamente balanceada.
Esto en gran medida es verdad, pues lo que comen está definido por verdaderos expertos en nutrición, pero algunos de los máximos exponentes de las carreras sorprenden al revelar sus "debilidades" gastronómicas.
Para cualquier corredor "terrenal" el comer algo inadecuado antes de un entrenamiento o competencia puede provocar desde malestares estomacales hasta el abandono de la prueba.
Pero los dioses del atletismo pueden darse el lujo de saborear bebidas azucaradas, nuggets, hamburguesas y papas fritas... eso sin importar la cantidad.
Todos los atletas de primera línea recomiendan comer antes de correr para proveer al cuerpo de energía para satisfacer las demandas del entrenamiento o competencia.
Pero hay quien exagera cuando de antojos se trata.
El bicampeón olímpico y plusmarquista mundial Usain Bolt ha reconocido que, cada que tiene oportunidad, come nuggets de pollo de una famosa cadena de comida rápida.
Bolt calcula que, durante los 10 días que pasó en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, comió unos mil nuggets, lo que significaría haber ingerido alrededor de 47 mil calorías.
En su libro "Faster Than Lighting" asegura que también comió papas fritas y un pay de manzana durante los días en los que se alzó con los títulos de los 100 y 200 metros y del relevo 4x100.
Pero el asunto de los antojos no para ahí con Bolt, quien gusta de las bebidas energéticas y hasta de la cerveza oscura.
Cabe aclarar que la alimentación del hombre más rápido del mundo se basa en pescado, arroz, pollo y carne de cerdo o ternera, e incluye el ñame, un tubérculo con mucha fibra y vitaminas A y C.
Otro que parece no tener problemas con lo que come es Kenenisa Bekele, dueño de los récords de 5 mil y 10 mil metros, quien ha sido visto devorando un gran sandwich antes de competir o celebrando una victoria con una hamburguesa.
Otro etiope, Haile Gebrselassie, considera que correr es como comer para él, pero incluso esta disciplinada estrella de las pruebas de fondo llega a saborear una hamburguesa y papas fritas, aunque siempre aconseja que las personas se alejen de los alimentos grasosos.
Quien no se sale del "libreto" a la hora de comer es Mo Farah. La forma en cómo se alimenta ha sido calificada incluso como monótona -verduras cocidas, pasta, pollo a la plancha-, pero nadie puede criticar a un atleta en ese aspecto si entre sus logros...
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