Plaza Pública / Hacia el 2006
| Autor | Miguel Ángel Granados Chapa |
Precedida por prolongados y agitados preámbulos, apenas hoy comienza, formalmente, la contienda que antecede a la constitucional que el 2 de julio próximo permitirá el relevo en la Presidencia de la República y el Congreso. Hoy los miembros activos y adherentes del PAN irán a las urnas en 10 estados, están haciéndolo a lo largo de este domingo, para decidir si su candidato presidencial es Felipe Calderón, Alberto Cárdenas o Santiago Creel, citados en el orden alfabético de sus apellidos.
El jueves pasado el comité de campaña de Creel publicó los resultados de una encuesta encargada por el propio comité en las 10 entidades cuyos nombres quiso pero no pudo decir de memoria el jalisciense Cárdenas. Durango, Guanajuato, Hidalgo, México, Nuevo León, Querétaro, San Luis Potosí, Tamaulipas, Tlaxcala y Zacatecas. Si el día de hoy, preguntó la empresa Marketing Group entre el 4 y el 11 de agosto a 3 mil 631 panistas, fueran las elecciones internas, ¿por quién votaría usted? Entre los miembros activos, 50 por ciento lo haría por Creel, 38 por Calderón y 12 por Cárdenas. La ventaja del primero es más acusada entre los adherentes, pues 62 por ciento se inclinaría por él, 30 por Calderón y 8 por Cárdenas. De esa suerte, y en ese orden, los totales son de 58, 33 y 9 por ciento respectivamente.
Esa noche, el jueves, Televisa realizó un encuentro entre esos aspirantes. No lo harán, porque los consejeros del IFE se muestran, por decirlo sin ofender, cautos en exceso respecto del dinero gastado en las precampañas. Pero sería pertinente que indagaran la naturaleza de esta aportación del consorcio televisivo a la democracia o al PAN. Regalar una hora de tiempo hacia la medianoche puede ser un acto plausible o reprobable según su naturaleza. Como empresa mercantil, Televisa no puede hacer abiertamente contribuciones a las campañas electorales, porque lo prohíbe el código respectivo. Y sin embargo la apariencia es que divulgó sin pago un acto partidista, pues además de los contendientes aparecieron en el escenario dos miembros de la comisión electoral interna, doña María Elena Álvarez y Héctor Larios, y el propio presidente del partido, Manuel Espino.
No hubo debate propiamente dicho. Apenas en un momento se cruzaron indirectas los participantes. Calderón lamentó que los programas de seguridad pública que propone Creel no los hubiera considerado como jefe que fue del gabinete de orden y respeto en el gobierno de Fox. Creel respondió que la seguridad pública había dejado ser competencia de Gobernación (lo que no dio respuesta al reproche de Calderón, pues la Secretaría de Seguridad Pública estaba encuadrada en el gabinete coordinado por Creel). Y dijo también que mientras unos tiraban piedras, él las utilizaba para construir...
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