Para pleito vecinal rescate escultórico
| Autor | Israel Sánchez |
Cuando tenía 10 años, Emmanuel Manrique y otros niños de la Unidad Habitacional Torres de Mixcoac jugaban a escalar una gran estructura piramidal en la plaza principal. Ganaba el que se acercara más a la cima de esta pieza que ronda los 20 metros de altura y que, lo supieran o no, fue creada por Mathias Goeritz.
Ahora, el productor de televisión de 56 años dirige un comité ciudadano que busca rescatar la obra que el artista de origen alemán erigió -a petición de Abraham Zabludovsky y Teodoro González de León, proyectistas del conjunto residencial-, sorteando con acierto las formalidades burocráticas, mas no así las trabas de la administración vecinal.
"Se ha dejado (la escultura) en un estado de indefensión total. Hay en este momento los recursos para repararla, pero, ya que está el recurso, hay gente que quiere impedir este arreglo, con todo y que lo están haciendo profesionales", lamenta Manrique en entrevista.
Los fondos, detalla, se obtuvieron a través de la Procuraduría Social (Prosoc) mediante el programa Ollin Callan, que tiene como propósito "contribuir al mejoramiento y mantenimiento u obra nueva de las áreas y bienes de uso común de las unidades habitacionales de interés social de la Ciudad de México", describe el portal de la dependencia.
En total, se entregaron 691 mil 200 pesos a finales de diciembre de 2018; 900 pesos por cada departamento (48 en cada uno de los 16 edificios). De ahí, alrededor de 444 mil pesos están destinados a la atención de esta pieza, conocida simplemente como "La Pirámide", y el resto es para restaurar una escultura de Jorge Dubón, también al interior de la unidad.
Una vez que estaban por comenzar los trabajos por parte de Jaime Gutiérrez Islas -subcontratado por el Patronato de la Ruta de la Amistad, entidad que brinda asesoría a la iniciativa liderada por Manrique-, la administración del conjunto frenó las acciones mediante el personal de vigilancia.
Por si esto fuera poco, entró al juego una entidad llamada Fundación Mathias Goeritz A. C., la cual, a pesar de que ya había estado presente en una asamblea y había ofrecido incluso un proyecto de iluminación para la escultura, colocó sobre ésta una pegatina en la que dicen desconocer cualquier intervención, justo un día antes de que comenzaran los trabajos.
"(La Fundación) nunca nos nombró: 'Requieren de mi autorización para hacer esto'. Y es...
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