De Política y Cosas Peores / Pago de impuestos

AutorCatón

Según es bien sabido, los escoceses tienen fama de ser extremadamente ahorrativos. En la sala de espera del hospital se hallaba uno esperando el resultado de la delicadísima intervención quirúrgica a que su mujer estaba siendo sometida. Aparece el cirujano en la puerta del quirófano y dice al escocés: "¿Recuerda usted, señor McStiff, que me prometió regalarme un Rolls Royce último modelo, y pagarme el triple de mis honorarios habituales si salvaba a su esposa?" "Sí, -responde McStiff lleno de ansiedad-. Recuerdo bien que le ofrecí eso". "Por desgracia me fue imposible salvarla -dice el médico-. Su esposa pasó a mejor vida". "¡Dios santo, doctor! -exclama el señor McStiff-. ¡Qué susto me dio usted!"... Le dice un señor a otro en la oficina: "Vaya si hay individuos majaderos. Capronio me dice que me apuesta 10 mil pesos a que mi mujer me engaña". "No aceptes -le aconseja el otro-. A ése siempre le gusta apostar sobre seguro"... El padre Arsilio leía su breviario cuando llegó Babalucas. "Oiga, padre -le dice en tono de reclamación-. Usted me dijo que si me paraba en medio de la lluvia durante media hora, y alzaba los ojos al cielo, el Señor me revelaría la verdad. Ayer que llovió estuve una hora bajo la lluvia mirando hacia arriba, y lo único que conseguí fue sentirme un perfecto indejo". "¿Lo ves? -exclama el padre Arsilio-. ¡Ya te la reveló!"... El licenciado Draconio, juez de lo criminal, se dirige al acusado y le dice con severidad: "Lo sentencio a 99 años de prisión. ¿Tiene usted algo que decir?" "Nada, señor juez -responde el tipo con voz llena rencor-. Únicamente que es usted muy generoso con el tiempo de los demás"... El borrachito paseaba por las avenidas del panteón. Ve un monumento funerario en cuya lápida se leía una doliente inscripción laudatoria: "Ésta es la tumba de un político y un hombre honrado". "Qué raro -murmura el temulento rascándose la cabeza con asombro-. ¡Dos hombres en una misma tumba!"... Doña Litigia y don Pugnacio formaban un matrimonio muy mal avenido. Los dos tenían carácter belicoso; reñían por el menor motivo, por quítame allá estas pajas. A...

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