DE POLÍTICA Y COSAS PEORES / Causa difícil

AutorCatón

Un prominente ejecutivo fue acusado de adulterio por su esposa. En el curso del juicio el abogado de la demandante interrogó con fiereza a la amiguita del casquivano señor. "¿Es cierto -le preguntó ante el juez-, que la noche del 20 de abril -aniversario, por cierto, del nacimiento de Hitler- estuvo usted con el acusado en el Hotel Camagua?" "Es cierto -admitió, llorosa, la curvilínea interrogada-. Pero es que él me engañó". "¿Cómo que la engañó?" -inquiere el letrado. "Sí -responde entre sus lágrimas la chica-. Cuando nos registramos le dijo al encargado de la recepción que yo era su esposa"... Don Trisagio y doña Maitina eran una pareja muy religiosa. Cierto día ella le comunicó a su marido que ya no harían el amor en día domingo. "¿Por qué no?" -preguntó él. "Es día del Señor -declaró ella-. Tenemos que respetarlo". "El amor -intentó don Trisagio razonar- es un gozo divino". "Lo será para ti -se atufó doña Maitina-. Para mí constituye un trabajo, y los domingos no se debe trabajar"... Cuando todos lo demás santos y santas no pueden conseguir que el milagro se produzca, todavía queda esa amable protectora en cuya frente sangraba de continuo la herida de una de las espinas de la corona de Cristo, cruento regalo de su celestial esposo. Bellos prodigios obraba Santa Rita. En el lecho de agonía le pidió a una prima que le llevara dos recuerdos de Roccaporena, su solar nativo: una rosa y un higo del huerto familiar. Se angustió la mujer: eran los días más crudos del invierno; la aldea estaba cubierta por las nieves de enero. ¿Cómo podía traerle a Rita lo que le pedía? Hizo el viaje a Roccaporena, sin embargo, y halló lleno de rosas el jardín donde la santa había pasado su niñez, y colmada de frutos la higuera a cuya sombra oraba. Mayor milagro que ése espero yo de la santita. Le pido que la elección presidencial del 2012 se decida sin indecisiones, por amplio margen de votos para el ganador, sea éste quien sea. Le pido ese milagro porque si se repiten las dudas de la elección pasada, y con el poco margen de confiabilidad...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR