Tiempo de Negocios/ Ahora diputados priístas y panistas proponen un impuesto del 15 por ciento a los servicios telefónicos

AutorDarío Celis Estrada

La posibilidad de aplicar un impuesto del 15 por ciento a los servicios telefónicos no es cosa menor. La propuesta trascendió la semana pasada y de inmediato se deslindó a las Secretarías de Hacienda y Comunicaciones.

Tanto en el campamento de Pedro Cerisola como en el de Francisco Gil Díaz se rechaza la paternidad del planteamiento. Fuentes de la industria se lo endosan a los miembros del Congreso.

Al parecer la idea provino del priísta Enrique de la Madrid, quien incluso contaría con todo el respaldo del presidente de la Comisión de Hacienda en la Cámara de Diputados, Oscar Levin Coppel.

La bancada tricolor ya rebotó la propuesta con Enrique Jackson, líder de la fracción priísta en la Cámara de Senadores. Por los panistas el encargado de impulsar esta iniciativa es Manuel Minjares, quien ya tocó base con Felipe Calderón.

Los que ya reaccionaron en contra fueron Jorge Chávez y Emilio Goicoechea, secretario de la Comisión de Hacienda en la Cámara de Diputados y miembro de la Comisión de Comunicaciones en la de Senadores, respectivamente.

No queda debidamente claro si el gravamen sería a los servicios telefónicos en general, o si únicamente aplicaría en la telefonía celular. Pero como quiera que sea las principales telefónicas del país lo rechazan de antemano.

Se argumenta que más que inhibir el desarrollo del sector, el Gobierno debería estar sentando las bases para crecer la teledensidad del país, aún estancada en un promedio de 13 líneas por cada cien habitantes.

Firmas como Telmex al mando de Jaime Chico Pardo, Alestra que maneja Rolando Zubirán y Avantel que capitanea Oscar Rodríguez no descartan cancelación de contratos y una avalancha de desconexiones de líneas.

El impacto sería directo en el servicio residencial, que absorbe el 75 por ciento de la planta instalada. Curiosamente el 58 por ciento de esos usuarios apenas realizan las cien llamadas a que tienen derecho por la renta mensual de la línea.

Nada más para dimensionar las implicaciones del gravamen, déjeme decirle que en la actualidad más de un millón de líneas telefónicas funcionan con lo que se denomina "media suspensión", a consecuencia de adeudos contraídos.

Esto quiere decir que sólo pueden recibir llamadas porque el operador les restringió el servicio para regresarlas. O sea que imagínese lo que sería un impuesto en un contexto de falta de liquidez por parte de los usuarios.

Como otro dato adicional apunte que del total de los teléfonos celulares que funcionan en nuestro...

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