Por el puro gusto
| Autor | Ivett Rangel |
Que los vivos colores de frutas y verduras apenas traídas del campo, el dulce aroma a comida recién preparada y la amabilidad de las cocineras tradicionales sirvan de inspiración para recorrer México a través de distintas rutas gastronómicas y enoturísticas.
Pronto, el viajero celebra el que la cocina mexicana haya sido nombrada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, en 2010.
OAXACA
LOS MIL SABORES DEL MOLE
Para deleitarse con moles de distintos colores y ricos sabores, nada como Oaxaca.
En este estado se pueden probar siete variedades: rojo, verde, amarillo, negro de Oaxaca, coloradito, chichilo y manchamanteles, y desentrañar la magia que hay en la preparación de cada uno de ellos.
Y en pleno corazón de la capital se localiza el mercado 20 de Noviembre, dedicado a la venta de comida típica oaxaqueña, donde además de poder degustar todos estos moles, también hay tlayudas, tasajo y caldo de piedra, y para beber, un chocolate de agua o un mezcal.
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QUERÉTARO
DE QUESO, VINO Y MUCHO MÁS
La Ruta Arte, Queso y Vino recorre 11 productoras de queso y 26 vitivinícolas distribuidas en los municipios queretanos de Cadereyta de Montes, Colón, El Marqués, Ezequiel Montes, Tolimán, San Juan del Río, Tequisquiapan, Pedro Escobedo y Huimilpan.
De aquí, cualquier viajero sale cargado de recuerdos: quesos frescos o maduros, miel gourmet, pan, aceites y cervezas artesanales. Para maridar, vinos tintos elaborados con uvas Malbec o Syrah, blancos con Sauvignon Blanc y espumosos con Pinot Noir, Chardonnay y Saint Émilion.
Además de probar sabores de la región, hay que visitar la Sierra Gorda queretana y sus célebres misiones franciscanas.
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BAJA CALIFORNIA
ENTRE VIÑEDOS Y EL MAR
El Valle de Guadalupe, en Ensenada, es la meta al noroeste del País. Maridadas con seductores atardeceres, se beben copas de vino en alguna de las más de 150 vinícolas que hay en la región y los valles vecinos, y en algunos de los más seductores restaurantes de chefs que han apostado por tener sus propios criaderos y huertos.
En un recorrido hay que degustar las delicias del mar, como pulpo, abulón o atún. La langosta con frijoles y la ensalada César ya son platos clásicos.
También se puede acudir a las cervecerías que se encuentran entre Tijuana y Tecate para conocer el proceso de elaboración de esta otra bebida.
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CHIAPAS
DELEITES EN TAZA
En las montañas del Soconusco, al sur de Chiapas, domina un aroma: el del café. Es una...
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