Rastrean arte japonés en obras novohispanas
| Autor | Erika P. Bucio |
La influencia japonesa en el México virreinal produjo una gran riqueza de biombos y lacas como expresión del arte namban.
Los japoneses acuñaron el término "namban" para referirse a los "bárbaros del sur": los occidentales tanto portugueses como novohispanos que comenzaron a llegar a Japón a partir de 1543, como resultado del intercambio comercial.
En el plano artístico esta presencia occidental motivó la decoración de biombos y cajas lacadas con escenas de comerciantes portugueses y misioneros jesuitas desembarcando de sus naves, con sus ropas y mercancías que sorprendieron a los habitantes del archipiélago.
Así surgió el arte namban que llegó a México en el siglo 17, con las primeras embajadas de los shogunes a partir de 1610 con Rodrigo de Vivero y las migraciones clandestinas con la Nao de China.
En territorio novohispano, el arte japonés adquiriría un sello mexicano como demuestra el anticuario Rodrigo Rivero Lake en El arte namban en el México virreinal (Turner) donde rastrea sus orígenes en el País, las principales escuelas entre los siglos 16 y 19, sus características técnicas, estilísticas e iconográficas.
"Ese sello mexicano se aprecia en el colorido, la escuela de pintura Kano es monocromática, vamos a decir, muy gris, después evoluciona y entra el color, lo mexicano. El cambio de color es drástico", explica.
El libro ofrece además una visión de la expansión del virreinato hacia el Océano Pacífico, sus aportaciones en la colonización de Asia y los primeros acercamientos de los novohispanos a la cultura japonesa.
Muchos de los japoneses venidos a México se habían formado en el arte namban en el archipiélago, y al ser proscrito el cristianismo en Japón se vieron forzados a emigrar.
Entre esos inmigrantes figuró el pintor Emonsaku y contribuyó a la creación del arte namban en la Nueva España, alrededor de 1670, alcanzando el periodo de esplendor entre 1690 y 1710.
En los biombos y lacas se plasmaron escenas de la Conquista, mapas de la Ciudad de México y del sistema de castas.
Estos tesoros del arte namban, altamente apreciados por los nobles y militares de la Nueva España, sobreviven en museos de Japón, Estados Unidos, Europa y México.
El anticuario explica que en el País se conservan pocas piezas debido a que eran elaboradas para su exportación a Portugal y el resto de Europa, y eran llevadas por virreyes y personajes del alto clero de regreso a España.
Rivero Lake invirtió siete años en la investigación, cuyas primicias adelantó...
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