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AutorCésar Martínez

TEPOZTLÁN, Mor.- Con 25 años de experiencia combatiendo incendios desde el aire, al capitán Enrique Paz le da satisfacción ayudar a la gente de Tepoztlán, aunque el cansancio físico es intenso.

"Es un tipo de vuelo muy cansado, requiere de una gran concentración y el desgaste físico es muy alto", señala el director del área de aeronáutica de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

"Es una manera de volar muy complicada, porque llevas la máquina, combustible y agua, y para hacer un tiro certero, a veces para apoyar a la gente en tierra, requiere mucha precisión, no te puedes distraer con nada".

Llegó el martes, luego de colaborar en el combate a un incendio entre Coahuila y Nuevo León, y otro en Huatulco, en una de las rachas más largas que ha tenido en su carrera.

En Tepoztlán, la Conagua usó dos helicópteros, el que pilotó Paz fue un Bell 212, con un tanque para almacenar mil 200 litros de agua.

Para cargar el agua, el helicóptero debe quedarse quieto en el aire sobre un tanque lleno del líquido, descender hasta que una manguera que cuelga entre en contacto con el agua y activar un sistema de succión que llena el...

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