Rebanadas / Recordando los tiempos universitarios

AutorCony Delantal

TARDE DE CINE Y COMIDA

Ya les había platicado que ahí en Emilio Castelar, en Polanco, justo donde era Casa Domit, abrieron de un jalón tres restaurantes: 900, Lincoln y Mar del Zur. Todos en el mismo predio.

Al 900, como recordarán, ya fui hace un par de meses. Por eso ahora fuimos al Mar del Zur, del chef y reconocido banquetero Eduardo Wichtendahl Palazuelos, que también ha dado de qué hablar.

El lugar es lindo, y su terraza fresca y agradable. Ideal para brindar con una copita y tomarse las cosas con calma.

Fue precisamente esto lo que hicimos una de mis mejores amigas y yo después de habernos reído de lo lindo viendo la película de Monsters University. ¿Ya la vieron? Si no lo han hecho, háganlo. Es una bonita historia que a nosotras nos dio tema de conversación durante la comida.

Pero no me quiero distraer. Déjenme contarles que de entrada ordenamos su carpaccio de pulpo ($150) y resultó una grata sorpresa. Finas láminas de pulpo del pacífico muy bien marinadas con cítricos orientales y soya. Lo mejor de todo era que llevaba manzana rebanada súper finita y tiritas de tortilla frita. Un sabor acidito, fresco y original. Muy bien presentado además, como todo lo que comimos.

El tiradito de robalo ($130) no se quedó atrás. Los cortes finos venían semi-cocidos con aceite de ajonjolí. También descubrimos por ahí un sabor a jengibre delicioso que de hecho resultó ser la esencia del platillo.

La cocina de Mar del Zur tiene una influencia oriental que se nota en cada platillo y sobre todo en ingredientes como la soya, el ajonjolí y el jengibre. Por ahí en el menú también vimos un tempura y una ensalada thai.

Esto se debe a que el guapo chef trabajó en Bangkok, Tailandia. De ahí que su cocina se llame o denomine "mex-thai". El resultado es atractivo.

Por cierto que al enterarnos de esto nos quedamos pensando en todo lo uno a veces tiene que hacer o vivir antes de ver sus sueños hechos realidad. Como Palazuelos, que después de viajar y conocer otras cocinas y culturas, y dedicarse al catering, finalmente puso su restaurante.

Un poco sobre esto va la película de Monsters. Una historia sobre los distintos caminos que elegimos para alcanzar nuestros objetivos. Por eso se las recomiendo. Su mensaje va más para los adultos que para los niños. Toda una lección de vida.

Volviendo al restaurante, entre otras cosas agradecimos que su menú, conciso y completo, tuviera sección de sopas.

Nosotras pedimos el caldo de coco tierno ($85). Y es que cómo dejarlo...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR