Un recinto musical para Los Ángeles
| Autor | Ivett Rangel |
REFORMA/ Enviada
LOS ÁNGELES.- Con el Walt Disney Concert Hall se construyó no sólo un hogar para la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles y el Master Chorale, sino también una esperanza de renacimiento para el centro de esta ciudad y una promesa de una era distinta para la música.
En el inmueble, que a primera vista se le reconoce su hermandad con el Museo Guggenheim (Bilbao, España) por sus "olas" de acero inoxidable, sello del arquitecto Frank Gehry, la música clásica tendrá una nueva dimensión, cercana a las personas y receptiva de otro tipo de expresiones artísticas, según las expectativas de Ed Yim, director de programación de la sociedad filarmónica de esta ciudad.
El pretende conectar la música con escritores, bailarines, pintores, videógrafos, arquitectos y figuras del rock como Radiohead. Todo basado en tres áreas de desarrollo: world music, jazz y clásica.
"Sí somos una orquesta, pero queremos transformarnos en una organización musical con cabida a diferentes tipos de música, por lo que hemos planeado una extensa programación con artistas conocidos y no conocidos de todo el mundo.
"La idea, además, es que las personas se acerquen a la música, y en especial aquellas que no estén familiarizadas con la música clásica, por eso haremos cosas inusuales para una orquesta filarmónica; queremos tejer todo tipo de conexiones", dice Yim.
De ahí que surgieran los "viernes casuales", días en los que los músicos no visten de gala como acostumbran, lo que hace que el protocolo también se rompa en los espectadores.
O contar el proceso histórico de una pieza con el propósito de que se recupere la sensación de la primera ocasión en la que se presentó.
El surgimiento del Walt Disney Concert Hall (WDCH) se espera impacte social, económica y culturalmente para que atraiga a visitantes día y noche al centro de Los Angeles, el cual en las últimas décadas "muere" a las 17:00 horas al haberse convertido en una zona de oficinas. Y que la misma comunidad regrese a vivir ahí, por lo que más de 3 mil viviendas están ahora en construcción.
Mindy Rosen, directora de comunicación de Live, Work & Play in Downtown, señala que su único propósito es recuperar el esplendor del área.
El costo de los boletos para el WDCH oscila entre los 175 y 15 dólares, dependiendo del concierto, aunque habrá presentaciones gratuitas. Y cada año, habrá seis actuaciones especiales preparadas para niños.
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