Recursos Humanos: Sufren acoso laboral

AutorHugo de la Torre

Carlos llegó puntualmente a trabajar y en el trayecto a su oficina se cruzó con su jefe inmediato. Antes de estirar el brazo para saludarlo, levantó la cara y sonrió, pero no obtuvo respuesta.

El ejecutivo de una compañía de mercadotecnia analizó los resultados del área a su cargo. Eran buenos, se habían alcanzado las metas previstas. Sin embargo, seguía preocupado, con la sensación de que había hecho algo mal, aunque no sabía qué.

Intentó hablar con su jefe, pero no fue recibido, y por la tarde se realizó una junta a la cual no fue convocado. Dos meses después, ya completamente aislado, decidió renunciar, sin conocer exactamente qué había sucedido.

Carlos fue víctima de un caso de 'mobbing'0 (molestar) o acoso psicológico laboral, cada vez más común en México, sin el atenuante de leyes que lo combatan.

Expertos en recursos humanos y headhunters han detectado el crecimiento de este fenómeno que afecta a cientos de ejecutivos.

Empresas del área editorial y de los sectores financiero y de las telecomunicaciones registran el mayor número de casos, como resultado de las fusiones o del difícil entorno económico por el que atraviesan, de acuerdo con los especialistas.

Ante la poca flexibilidad de la legislación laboral para dar de baja a un empleado sin pagar indemnización, algunos directivos han recurrido a este tipo de prácticas.

Sam Podolsky, experto en contratación de altos directivos, asegura que no son pocos los casos de renuncias de ejecutivos por esta causa, aunque no todos lo denuncian, ante el poco conocimiento que existe del problema.

"Una persona en circunstancias extremas no aguanta más de dos meses", explica Podolsky.

México carece de una regulación legal sobre el tema. Si bien la legislación laboral contempla que el patrón no debe cometer faltas de honradez en la relación con sus empleados, no registra el término acoso laboral ni su concepto.

"En nuestra legislación laboral no existe el término y en nuestra legislación penal sí existe, pero sólo la figura de acoso sexual", explica el especialista Luis Manuel Guaida.

El acoso psicológico consiste en diseñar campañas de desprestigio contra alguna persona que goza de buena imagen y realiza con eficiencia su trabajo.

El objetivo es anular a la víctima para conseguir, a mediano o largo plazos, que abandone la empresa. Así, las compañías evitan cubrir indemnizaciones y enfrentar resistencias al momento de despedir a alguien valioso.

Los compañeros, del...

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