Redescubren Clipperton

AutorOscar Cid de León

Deshabitada desde 1917 y administrada por Francia a partir de 1930, cuando México perdió la soberanía sobre ella, la Isla de Clipperton espera ser redescubierta desde la ciencia y el arte.

Un grupo de ambientalistas y creadores de diversas disciplinas alista una expedición hacia el atolón que partirá de La Paz el 1 de marzo.

"El proyecto es mucho más grande que la expedición. La expedición es sólo un punto de inicio", advirtió ayer al anunciar el viaje Jon Bonfiglio, líder del proyecto en el que se embarcan, en tres veleros, 20 aventureros provenientes de ocho países.

The Clipperton Project busca documentar desde enfoques científicos y artísticos la situación ambiental de la isla, ubicada en el Pacífico a mil 280 kilómetros de las costas mexicanas, y con ello generar una conciencia global sobre el cuidado de los ecosistemas marinos.

Mientras científicos estudian la zona, su flora, fauna y clima, un grupo de creadores -un escultor, una coreógrafa, un fotógrafo, un escritor, entre otros- crearán una suerte de narrativa del viaje desde sus propios lenguajes.

Bonfiglio habla de una comunidad multidisciplinaria que tiene en el ambientalismo su bandera común.

"Hay una parte en la que, como artistas, podemos intervenir: la toma de conciencia", apuntó Carlos Ranc, artista franco-mexicano. "Me parece pertinente esta convivencia forzada que implica estar en un barco y después en una isla limitada (junto a hombres de ciencia). Es ahí donde podemos aprender uno del otro, perderle miedo al otro".

La expedición, apoyada por Greenpeace y el British Council, durará un mes, alrededor de 10 días de viaje en altamar, y su tripulación está dispuesta a enfrentar cada desafío que supone pernoctar en una isla inhóspita con una dimensión de apenas 6 kilómetros cuadrados. Clipperton fue descubierta por un pirata inglés en 1705 y anexada a México tras la Independencia. Fue explotada por Estados Unidos en la segunda mitad del Siglo 19 y principios del 20, dejándola sin guano.

Posteriormente, la dominó Francia y EU; incluso Dwight Eisenhower pensaba establecer allí una base militar.

Pasaría a México de nueva cuenta durante el Porfiriato, pero sería abandonada a su suerte tras el estallido de la Revolución, estacionándose entre sus habitantes el hambre y la muerte. Devino incluso en el "reino" de un tal Victoriano Álvarez, quien por azares del destino se convirtió en el último varón de la isla; los demás habían muerto al intentar alcanzar un buque que pudo rescatarlos...

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