Tiempo de Negocios / Reestructura Sicartsa dls. 535.4 millones; bancos extienden plazo a 9 años con 2 de gracia

AutorDarío Celis Estrada

Siderúrgica Lázaro Cárdenas Las Truchas, mejor conocida como Sicartsa, recién suscribió con un sindicato de bancos acreedores un acuerdo para reestructurar un adeudo de 683.8 millones de dólares.

A diferencia de otras empresas, en el caso del Grupo Villacero de Julio Villarreal, controladora de Sicartsa, en todo momento hubo voluntad y buena fe para llegar a un feliz arreglo con los ocho bancos, entre nacionales y extranjeros.

Las instituciones se concentraron en la deuda recalendarizada, que es el pasivo más abultado y que asciende a 535.4 millones. El BBVA-Bancomer, que dirige Jaime Guardiola, fungió como el agente financiero de la reestructura.

Esta se dividió en tres tramos: créditos que mantienen sus garantías originales; créditos de corto plazo que se transfirieron a largo, y arrendamientos y agencias gubernamentales extranjeras.

Se otorgó un plazo de nueve años y tres meses, con dos años de gracia. Amortizaciones crecientes y pago "bullet" al final de ese periodo con posibilidad de deuda refinanciable. La tasa que se negoció fue Libor más cuatro.

Asimismo, se estableció una obligación solidaria de las principales subsidiarias de Sicartsa. Se respetaron las garantías originales y se aportaron en prenda las acciones de otras empresas de esa siderúrgica.

También se dio hipoteca industrial sobre ciertos activos fijos de Sicartsa y en caso de que se genere flujo de efectivo en exceso, se utilizará para el pago anticipado de capital. Villarreal mostró en todo momento la mejor disposición.

¿Por qué se complicó la situación financiera de Sicartsa? Fueron variantes externas e internas. De las primeras la más importante fue la sobreoferta que se generó en la capacidad instalada para producir acero.

Igualmente la desaceleración de las principales economías consumidoras de acero y los subsidios otorgados por algunos países que propiciaron distorsiones en el mercado y que dieron lugar a prácticas comerciales desleales.

De las internas el apalancamiento originado por las inversiones en modernización y productividad. A ello agregue una serie de paros laborales ilegales iniciados a mediados de diciembre del 2001.

Como si todo lo anterior no fuera suficiente, en febrero del 2002 hubo un accidente en un horno de aceración. El efecto combinado de ambos eventos provocó una semiparalización de actividades durante casi cinco meses.

De los 683.8 millones, 535.4 millones es la deuda recalendarizada y objeto de la reestructura y 148.4 millones es deuda...

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