Reforma política ¿y ciudadana?

AutorErnesto Núñez

Dieciséis meses después de complejas negociaciones, los senadores cuentan ya con un dictamen que resume el máximo consenso al que pudieron llegar en torno a la reforma política.

El jueves pasado, en la reunión de las comisiones de Puntos Constitucionales, Estudios Legislativos y Reforma del Estado, los senadores dieron a conocer un documento que retoma cinco de los 10 puntos que propuso el Ejecutivo en diciembre del 2009 y tres propuestas hechas por el PRI y el PRD.

Se excluyen algunas demandas ciudadanas que habían sido propuestas por el Ejecutivo, como la reducción de las Cámaras, la reelección de presidentes municipales y el referéndum para reformas constitucionales.

Y se ignoran otras enarboladas por organizaciones como la Asamblea Nacional Ciudadana, como reducir el financiamiento público a los partidos y establecer mecanismos de transparencia para el ejercicio de esos recursos, propuestas que había retomado el PAN en la iniciativa que presentó en febrero del 2010.

De las propuestas que sí están en el proyecto de dictamen destacan dos que, de acuerdo con los especialistas que participaron en el seminario sobre reforma política celebrado en el Senado el 25 y 26 de enero del 2010, sí pueden generar un cambio en el sistema político: la reelección de legisladores y las candidaturas independientes.

La reelección no aplicaría para los legisladores actuales; comenzaría a instrumentarse a partir de los diputados electos en 2015 y los senadores electos en 2018.

En candidaturas independientes habrá que esperar a que el Senado decida si aplican desde el proceso electoral del 2012 o se aplazan hasta el 2015, como se establecía en el primer borrador del proyecto de dictamen.

Otros puntos de la agenda de organizaciones ciudadanas tendientes a fortalecer la democracia participativa se incluyen, pero con límites y candados:

La consulta popular se prevé que sea propuesta por ciudadanos en un número equivalente al 2 por ciento de la lista nominal de electores (actualmente serían un millón 510 mil ciudadanos) y que sea aprobada y convocada por el Congreso, y revisada por la Suprema Corte de Justicia para verificar su constitucionalidad.

Se incorpora el derecho de los ciudadanos para iniciar leyes, pero mientras Calderón proponía que éste se ejerciera con las firmas de un número de ciudadanos equivalente al .1 por ciento del padrón electoral nacional (82 mil 179 ciudadanos), los senadores elevaron ese umbral al .25 por ciento (205 mil 449).

Los senadores...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR