Refuerzan casas por inseguridad

AutorRuth Muñiz

Sin importar que tengan que modificar los diseños originales de sus hogares, vecinos de la zona conurbada del Estado de México han colocado bardas, mallas o cámaras e instalado casetas en los accesos a sus fraccionamientos buscando más seguridad.

"La casa de mi abuelo tenía una barda de un metro, porque le gustaba que los vecinos vieran cómo cuidaba su jardín, hasta que un grupo de chavos se saltaron y le robaron", recordó el vecino de Satélite, José Joaquín Vival.

"Entonces, por el miedo, decidió levantar una reja que ya no dejaba ver sus rosales".

Como él, Macaria Lucas, vecina de La Herradura reforzó su hogar contra la violencia.

"Tuve que poner, además de la reja y una malla, una parte electrificada para que no se salten, porque se han metido tres veces a robarme", explicó.

"Ni modo, los ladrones son ellos y es uno quien termina encerrado en su propia casa".

Macaria Lucas asegura que en los 10 años que lleva viviendo en Huixquilucan ha modificado el diseño de su casa cuatro veces, buscando tener más seguridad.

José Zermeño, miembro del Colegio de Arquitectos de la entidad, explicó que, pese a ser un fenómeno poco documentado, la inseguridad ha provocado cambios en zonas habitacionales y residenciales de la zona.

"Regularmente los cambios a las casas se hacen después de algún incidente, no vienen los residentes cuando encargan la construcción y te dicen que la quieren de determinada forma para estar más seguros", explicó.

"El fenómeno es tangible cuando comienzan a modificar el diseño original".

Para Kevin Montaño, arquitecto de la FES Acatlán, los cambios en las casas a raíz de la inseguridad son un tema que aún falta por explorar en universidades.

"No se estudia como tal, pero sí, los alumnos de arquitectura deben saber que tendrán que enfrentarse a construir una casa con diseños específicos y que un par de años después el mismo dueño que les pidió detalles tan precisos ahora les va a pedir que los cambien, pues el modelo no es tan seguro", señaló el académico.

En recorridos hechos por La Herradura y Tecamachalco, en Huixquilucan; Satélite y Bosques de Echegaray, en Naucalpan; Valle Dorado, en Tlalnepantla, y Condado de Sayavedra, en Atizapán, se constató que predominan casas con bardas altas y electrificadas, y ventanas con refuerzos.

LA EXCEPCIÓN A LA REGLA

Vecinos de la Colonia La Florida, en Naucalpan, han decidido conservar el diseño original y la belleza de sus hogares, en contraste con lo que ocurre con la mayoría de los...

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