Regreso a la pantalla
Autor | Rafael Aviña |
Es cierto que la tendencia comercial hollywoodense ha generado el regreso de héroes y personajes del cine y la historieta y, a su vez, la continuación de secuelas de exitosas películas taquilleras. No obstante, ha crecido a su vez un cine surgido de la clandestinidad, de avatares de la producción independiente y del bajo presupuesto. Un cine que suele retratar horrores a todas luces cotidianos y, a la vez, incidir en los miedos y paranoias colectivas, creando impacto en la taquilla. Ello sin faltar la presencia de un cine mexicano que cobra cada día mayor importancia y que empieza a entender la responsabilidad histórica de sus tramas, más aún en este año de centenarios y bicentenarios.
De entrada, para este año destaca el regreso de tres veteranos y la participación de cineastas nacionales fogueados en el nuevo milenio que recuperan temas de la Historia. Por un lado, Jorge Fons está a cargo de El atentado, a partir de la novela de Álvaro Uribe Expediente del atentado, en la que se narra el intento de asesinato contra el Presidente Porfirio Díaz en 1897 a cargo de Arnulfo Arroyo, filme protagonizado por Daniel Giménez Cacho y José María Yazpik.
A su vez, figura Chicogrande, filmada por Felipe Cazals, con Damián Alcázar y Daniel Martínez, una suerte de western histórico inspirado en un relato de Ricardo Garibay, centrada en aquella expedición militar organizada por el Gobierno estadounidense para capturar a Francisco Villa en territorio mexicano luego del ataque del caudillo a Columbus, Nuevo México, en 1916.
Finalmente, el regreso de Alfredo Gurrola, luego de dos décadas, con Borrar de la memoria, estelarizada por Adalberto Parra, Rodrigo Virago y Diana García: un thriller de nota roja inspirado en hechos reales.
A éstos se suma el filme colectivo Revolución, con pequeños episodios a cargo de los realizadores Carlos Reygadas, Rodrigo Plá, Amat Escalante, Gerardo Naranjo, Fernando Eimbcke, Mariana Chenillo y Patricia Riggen; y El infierno, de Luis Estrada, una comedia negra sobre la corrupta realidad nacional.
El cine estadounidense de bajo presupuesto trae sorpresas para este 2010, como The Hurt Locker, que empieza a obtener varios premios importantes y seguro llegará a los Oscares, dirigida por Kathryn Bigelow y protagonizada por Ralph Fiennes y Guy Pearce. Ambientada en la guerra de Iraq, una unidad de élite deambula en una caótica población donde cualquiera puede ser un enemigo potencial y cualquier objeto, una bomba, en un relato que...
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