Resiste desalojo a balas; hiere a uno y se suicida

AutorJavier Garduño

Para evitar que su hijo lo echara del departamento que habitaba, Manuel Moreno Torres enfrentó ayer a balazos y con gas lacrimógeno al actuario y sus ayudantes, y antes de que la Policía lograra sacarlo de la vivienda se disparó en el corazón.

Uno de los cargadores que fueron contratados para sacar las pertenencias del inquilino de 70 años de edad, recibió tres disparos que lo tienen al borde la muerte.

Hasta el último momento, el anciano se negó a salir del condominio cuatro, edificio 22 de Río Tíber, colonia Cuauhtémoc, donde vivió hasta que su vástago, Mauricio Moreno Peralta, consiguió del Juez 20 Civil la orden de desalojo con autorización de violar las cerraduras al dar por concluido el juicio por desahucio.

A las 8:15 horas, el actuario Eduardo Salinas Ramírez se presentó en el inmueble, ubicado a cuatro calles de la Glorieta del Angel de la Independencia, para sacar a Manuel Moreno Torres como lo había solicitado el hijo.

"Eran bastantes, subieron como 12 personas. Yo me metí a bañar y escuché los golpes en la puerta de madera, pensé que era otra cosa, y después bajaron todos corriendo. El señor tenía varios años viviendo aquí, vivía solo y ya habían venido otra veces a desalojarlo, dizque no pagaba renta, pero no lo podían sacar", comentó el conserje del edificio.

Manuel Moreno Torres estaba desesperado porque estaban a punto de vencer la chapa para entrar y desde la sala disparó en varias ocasiones hacia la puerta, con una pistola, al parecer calibre .45 y les vació un cilindro de gas lacrimógeno.

El cargador Iván Gerardo Martínez Herrera, de 18 años, recibió tres balazos que lo derribaron herido de gravedad.

Sus acompañantes se atropellaron unos con otros al bajar por las escaleras para ponerse a salvo.

"Me habló para decirme: '¡Me están desalojando!, les disparé y creo que le di a un policía... me voy a suicidar'", relató la cuñada del anciano, quien antes de dispararse le llamó por teléfono.

"'No, por favor no lo hagas', le contesté, pero me colgó; es un señor ya grande y su hijo lo quiere desalojar, está loco, él ya tiene muchísimo dinero", recordó.

Mientras llegaban los refuerzos policiacos el cargador lesionado fue llevado en la ambulancia UM 558 del ERUM al hospital Rubén Leñero.

Poco después arribaron alrededor de 30 policías preventivos y judiciales, encabezados por el subsecretario de Seguridad Pública, Raymundo Collins, quienes cerraron el paso en los carriles laterales de Río Tíber, ante el temor de que hubieran más...

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