Sacan fármacos de tiburones y de caracoles

AutorPatricia López

Enviada

ENSENADA.- Científicos mexicanos desarrollan una nueva generación de fármacos y reactivos biológicos para diagnosticar de forma rápida y barata tuberculosis y VIH-Sida, así como para explorar nuevos tratamientos contra diabetes, cáncer y artritis a partir de anticuerpos de tiburón y de toxinas de un caracol marino venenoso, especies que viven en las aguas marinas vecinas a este puerto.

Los especialistas, encabezados por el biotecnólogo Alexei Licea, del Departamento de Biotecnología Marina del Centro de Investigación Científica y Educación Superior de Ensenada (CICESE), estudian desde 2001 los anticuerpos del tiburón Heteroduntus francisci, que neutralizan la actividad de bacterias, parásitos y virus (entre ellos el causante de la tuberculosis) y tienen propiedades antiinflamatorias, útiles para tratar los daños a los ojos y los pies ocasionados por la diabetes, atender trasplantes de córneas y males degenerativos como la artritis y el cáncer de mama, pulmonar y cérvico-uterino.

El proyecto es financiado con un convenio de colaboración por la empresa mexicana Laboratorios Silanes, la cual planea obtener patentes propias y desarrollar una nueva generación de medicamentos a partir de anticuerpos y toxinas de especies marinas abundantes en esta región. El primer proyecto, a concretarse en 2009, será una prueba diagnóstica para detectar tuberculosis. Una segunda versión busca detectar el VIH.

"Es una apuesta por la ciencia mexicana que amplía el nicho de mercado de Silanes utilizando sustancias de origen animal para crear nuevos fármacos", dijo el químico Jorge Paniagua Solís, director de Investigación de Silanes.

Los anticuerpos forman parte del sistema inmunológico. Son un tipo de proteínas solubles en la sangre, que identifican y neutralizan a virus, bacterias y parásitos.

"La idea es reproducir esa capacidad en bacterias controladas y utilizarla para neutralizar virus como el que causa la tuberculosis, que padecen una de cada tres personas en el mundo", detalló Licea.

Entre las ventajas de utilizar los anticuerpos del tiburón Heteroduntus francisci, Licea destacó que son proteínas termoestables, que no requieren refrigeración, ventaja que reduce costos de transporte al llevarlos como fármacos a zonas marginadas. Además, su uso podría ampliarse para tratar enfermedades autoinmunes como artritis, psoriasis y afecciones oculares.

Para obtener los anticuerpos, Licea y sus colaboradores capturan los cetáceos y los mantienen en...

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