Sacuden a Bolivia indígenas aymara

AutorAlejandro Pairone

REFORMA/ Argentina

Al igual que el de su antecesor Gonzalo Sánchez de Lozada, el Gobierno del ex Presidente boliviano Carlos Mesa se derrumbó esta semana a los pies de un conflicto que tuvo como protagonista a la nación aymara, el pueblo originario que busca reivindicación histórica e inclusión en la toma de decisiones de ese país.

Los aymara son la mayoría de quienes participan en las protestas callejeras y en los bloqueos carreteros en reclamo de la nacionalización de los hidrocarburos y la realización de una Asamblea Constituyente.

Fueron quienes en El Alto en enero arrancaron a Mesa la rescisión el contrato con la empresa Aguas del Illimani (de la francesa Suez), y quienes en el 2000 expulsaron, pero de Cochabamba, a la empresa estadounidense de saneamiento Bechtel.

Son los líderes de las organizaciones de campesinos, conducen los sindicatos urbanos y las entidades de mineros, atraen a los grupos estudiantiles universitarios y dirigen las organizaciones sociales que mueven a las juntas vecinales en las grandes ciudades. Además, hablan su propio idioma y tienen sus propias escuelas.

Los aymara conforman hoy un bloque social emergente integrado que en los últimos años articuló fuerzas en movimientos sociales, construyó liderazgos regionales y nacionales y montó un discurso político que erosionó al dominante en pos de un objetivo que es el acceso al poder, explicó el analista boliviano Álvaro García Lineras.

La nación aymara está conformada por 3 millones de personas, de los que unos 2 millones habitan Bolivia, medio millón Perú y el resto entre el norte de Argentina y Chile.

Viven en comunidad armónica con los quechuas, herederos del imperio incaico, que son 6 millones desde el sur Colombia hasta el centro argentino. Más de 2 millones residen en Bolivia.

Entre aymaras, quechuas, más guaraníes y una veintena de otros pueblos pequeños, los originarios suman el 70 por ciento de los 8 millones de habitantes que tiene Bolivia, según las estimaciones del último censo nacional de población de Bolivia, del 2001.

Ese movimiento étnico tiene en Bolivia dos vertientes políticas e ideológicas que se expresan en los liderazgos de Felipe Quispe y Evo Morales, ambos con categoría de "Mallku" (jefe comunitario), y que representan en los hechos dos proyectos de nación muy diferenciados.

Quispe es uno de los principales líderes de los campesinos y de algunas organizaciones sociales. Es licenciado en Historia, fue guerrillero y fundó en Movimiento...

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