San Cadilla
Pobre David
Cuando tienes cerca de 10 años de trayectoria en Primera División debes inspirar respeto a tus compañeros... a menos que seas David Cabrera...
Ayer por la tarde fue verdaderamente lastimoso ver cómo en una jugada de tiro libre en la recta final del horripilante juego entre Pumas y Veracruz en Ciudad Universitaria, el contención (se supone que de eso juega) de 29 años agarró luego luego la pelota con la intención de ser él quien cobrara la falta que podía significar para Pumas sacar un triunfo de lágrima. Cabrera abrazó el esférico e hizo la seña clásica del "yo, yo, voy yo", a sabiendas de que una de las poquísimas virtudes que aún conserva de aquel joven que debutó en agosto de 2009 bajo las órdenes de Ricardo Ferretti, es el cobro a balón a balón parado.
Sin embargo, al pobre David ni tiempo le dieron de acomodar la pelota para cobrar porque luego luego le cayeron encima sus camaradas y aunque todavía se paró unos segundos atrás de la pelota junto a Ignacio Malcorra y Pablo Barrera, a los pocos segundos, como no queriendo, empezó a caminar hacia el área y terminó discretamente perdiéndose entre los defensores veracruzanos mientras el talentosísimo capitán felino volaba el disparo.
Hasta los clavados de Pumas tienen que rascarle para encontrar un buen recuerdo de Cabrera en los últimos años y basta con echar un vistazo a sus números para checar que está en un tobogán de ostracismo que lo llevó de disputar 14 partidos en el Clausura 2018 -12 de ellos como titular- a solo 8 en el torneo pasado ¡ninguno como titular!
Este torneo lo inició también de suplente, entró de cambio y ni siquiera lo dejaron cobrar un tiro libre... Pobre David.
El dueño de CU
Ya entrados en el 2019 claro que no nos podemos olvidar del señor Fidel Kuri Grajales, que ya hizo su primer chistecito del año.
Me cuentan que si algo caracteriza al personal del Estadio Olímpico Universitario es que tiene muy bien designados los lugares de estacionamiento para sus invitados especiales. Es decir, usted llega en esta calidad, entra a la zona de aparcamiento y ya tiene designado su lugar para que no ande batallando para encontrar un sitio y demás.
Claro que al ser el dueño de los Tiburones, al señor Kuri le tocaba utilizar estos beneficios ayer por la mañana, pero resulta que a los guaruras del señor se les hizo súper manchado que su patrón caminara unos 5 metros del sitio designado a la puerta de acceso, y en lugar de ello aparcaron tremendo camionetón afuera del...
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