Empresa/ Segundo acto

AutorAlberto Barranco Chavarría

Como usted sabe, la alternativa más común en los proyectos de autoabastecimiento, cogeneración, producción independiente o producción externa de energía, que se realizan bajo el amparo de la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica promulgada en el sexenio salinista, apunta a plantas de ciclo combinado, cuyo sustento es justo el hidrocarburo.

Más aún, diez de las 13 plantas con que intenta en este momento ampliar su infraestructura la Comisión Federal de Electricidad, bajo el soporte de la posibilidad de financiamiento privado que plantea el esquema de los Pidiregas (Proyectos de Impacto Diferido en el Registro del Gasto), se ubican en la misma vía.

El problema, lo adivinó usted, es que el segundo acto reclamaría la repetición íntegra del primero, es decir convencer nuevamente a priístas y perredistas a integrar su voto al del partido en el poder en afán de alcanzar dos tercios del pleno.... para una segunda modificación al hilo del artículo 27 de la Constitución.

De hecho, ante la ausencia de la alternativa en la propuesta colocada en agosto pasado en la Oficialía de Partes del Senado de la República, los organismos empresariales habían lanzado gritos al cielo calificando de inmediato de incompleta la iniciativa... por más que los consoló a medias la revelación de la estrategia completa.

El caso es que a juicio del puñado de inexpertos a quienes de vez en vez escucha a medias el Presidente Vicente Fox, el haber lanzado el paquete completo dificultaría la negociación, dado que los legisladores de oposición tasarían a un precio más alto la posibilidad del sí... lo que implicaría, en el terreno práctico, ceder en otras iniciativas polémicas como la Reforma Laboral.

Más aún, según el cálculo de los sobrevivientes del grupo "Amigos de Fox", de haberse colocado en la mesa el menú integro, habría sido aún más difícil intentar una combinación equilibrada entre el planteamiento opositor que habla de sustentar el eje de la reforma con el refuerzo de la estructura pública, y la pretensión de ceder la cereza en el pastel, es decir el abasto de la clientela de élite, a los particulares.

Lo cierto es que la posibilidad de abrir el escenario a la participación privada en la extracción de gas natural está planteada desde noviembre del año pasado en el programa sectorial de energía 2001-2006 que colocó en la mesa la Secretaría del ramo.

El documento incluye, además, la apertura a los particulares nacionales y extranjeros en materia de construcción y...

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