Sergio González Rodríguez / El dispositivo
| Autor | Sergio González Rodríguez |
Leo. Leo que leo. Mentalmente me veo leer que leo y también puedo verme ver que leo. Me recuerdo leyendo ya y también viéndome que leía. Y me veo recordando que me veo leer y me recuerdo viéndome recordar que leía y leo viéndome leer que recuerdo haberme visto leer que me veía leer que recordaba haberme visto leer que leía y que leía que leo que leía.
Escribo. Escribo que escribo. Mentalmente me veo escribir que escribo y también puedo verme ver que escribo. Me recuerdo escribiendo ya y también viéndome que escribía. Y me veo recordando que me veo escribir y me recuerdo viéndome recordar que escribía y escribo viéndome escribir que recuerdo haberme visto escribir que me veía escribir que recordaba haberme visto escribir que escribía y que escribía que escribo que escribía.
Como es obvio, el párrafo primero es una interferencia o cortocircuito del texto canónico de Salvador Elizondo, El grafógrafo (1972), que reitera el párrafo segundo. La cita e intervención se debe menos a una proclividad paródica, que a otro hecho: entre la palabra "leo" y la palabra "escribo" se ha abierto un abismo de dimensiones tan vastas que si se dijera "cósmicas", apenas podría evocarse su magnitud. El abismo al que se refiere el ejercicio remite a la ruptura entre la palabra y la escritura, pero, más aún, a la separación entre ambas y su crecimiento tangencial hacia un nuevo orden donde la palabra y la escritura se abren a su reflexión proliferante en un impulso de transformaciones que las detonan: la imagen, el sonido, los nuevos constructos multidimensionales que la técnica y la cultura hacen posibles el día de hoy. La lectura y la escritura emergentes: el vaso de cristal primigenio que contenía la lectura y la escritura, quebró y de cada astilla surgieron nuevos recipientes de cristal, innumerables, expansivos, evanescentes.
Boris Groys afirma que "estamos confrontados hoy a la superproducción de memoria, de recuerdos, a la sobreproducción de lo antiguo. Ésta es la causa por la que tenemos tanta dificultad para identificar lo que es nuevo": no hay novedad sin pasado. La propia memoria, la fuente de la palabra y la escritura es un edificio de evocaciones.
Las nuevas tendencias narrativas son procedimientos emergentes de narrar vinculados a la actualidad y hacia el futuro. Su espacio-tiempo: la ultracontemporaneidad, que refiere al espacio/tiempo de la globalización (simultáneo, ubicuo, sistémico y productivo). Incluye el tiempo histórico-local y la noción de...
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