Serpentea por sus caminos
| Autor | Patricia Miranda |
Enviada
BUCARAMANGA, Colombia.- Invariablemente, al escuchar el jacarandoso nombre de la capital de Santander, hay quienes de manera espontánea empiezan a cantar el "Cúcara mácara títere fue". Aunque nada tienen que ver, es curioso notar cómo Bucaramanga (1) es tan dinámica como la festiva canción infantil.
Pocos saben que tiene una de las menores tasas de desempleo del país, que es una compulsiva productora de zapatos y que hasta ahí llegan jóvenes atraídos por la nutrida oferta universitaria y por la hermosura de las bumanguesas que les roban el corazón.
Por fortuna cada vez más viajeros llegan a disfrutar de sus jardines y de su gente que no sólo es hospitalaria sino amabilísima. Motivos por los que también es conocida como "Ciudad de Los Parques", "Ciudad Bonita de Colombia" y "Ciudad Cordial".
Al estar a una hora de vuelo de Bogotá, es el destino ideal para iniciar o concluir una visita por tierras santandereanas. Obligado es escudriñarla, nada de conformarse con mirarla a la distancia cuando se va hacia Girón (2) o al Parque Nacional del Chicamocha (PANACHI) (3).
El primero, a tan sólo 7 kilómetros, es Monumento Nacional. Sus minas de oro lo hicieron brillar en la Colonia. Hoy, además de conservar una nívea arquitectura, Girón se ha convertido en importante centro de peregrinaje. Muchos fieles arriban a la Basílica Menor de San Juan Bautista a pedir favores o pagar mandas al Señor de los Milagros. Aunque no es necesario ser creyente para caminar por las empedradas callejuelas, cruzar los puentes de calicanto o esquivar la presencia de las gitanas que adivinan la suerte.
A 50 minutos en automóvil de Bucaramanga está el Parque Nacional del Chicamocha, que es parada indispensable para observar paisajes sobrecogedores y descargar adrenalina.
La estrella natural es el Cañón del Chicamocha bañado por el río del mismo nombre. Este accidente geográfico de dos kilómetros de profundidad y unos 227 de largo fue nominado para convertirse en una de las 7 Nuevas Maravillas Naturales del Mundo, dentro de la categoría "Cuevas, formaciones rocosas y valles". Su majestuosidad puede ser admirada desde una de las 38 góndolas del teleférico.
¿Adictos al recreo? Atractivos sobran: mirar la zona desde un helicóptero, parapente o uno de los tres cablevuelos o tirolesas; practicar canotaje en el río; conducir buggies o visitar la Plaza de las Costumbres.
Luego de una taza de café colombiano, necesario es subir hacia ese jardín escultórico llamado Monumento a...
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