'Siempre supe que era gay'

REFORMA / Staff

Creció sabiendo de su preferencia homosexual, pero también probó y vivió la heterosexualidad. Así lo confiesa Ricky Martin en su autobiografía Yo, en la que asegura que durante su permanencia en Menudo, el grupo que lo lanzó a la fama, tuvo sus primeras relaciones sexuales, con mujeres y con hombres.

"Desde que tengo recuerdo, he sentido una atracción muy fuerte por otros hombres, y, aunque puedo decir que también he llegado a sentir mucha atracción y mucha química con mujeres, es el hombre el que, en las últimas, despierta en mí lo instintivo, lo animal.

"En el fondo, yo siempre he sabido que soy gay; sin embargo, me pasé años y años tratando de ocultármelo a mí mismo", confiesa el cantante, quien no menciona la bisexualidad como opción.

Aunque la venta oficial de Yo arrancará a nivel internacional el martes, algunos establecimientos de la cadena Costco en Puerto Rico decidieron adelantarse y desde el viernes colocaron copias del texto en sus secciones de libros, según el portal boricua PrimeraHora.

De acuerdo con el texto, el ídolo del pop (quien entró a Menudo en 1984, a los 13 años, y se quedó ahí por cinco) se intimidaba ante sus amigos por su virginidad y tuvo su primera relación, con una mujer, por presión de su grupo social.

"Era una chica muy linda y me gustaba, pero la verdad es que no había nada de intimidad o de cariño entre nosotros, y creo que por eso no fue una experiencia especial. ¿Esto es todo? ¿Esto es de lo que habla todo el mundo? ¡Uf, esto es fatal!", describe Ricky.

En Yo, también habla sobre su relación con la conductora mexicana Rebecca de Alba, a quien no menciona por su nombre, sino que se refiere a ella como "Coco Chanel/Brigitte Bardot".

"Nuestra relación era de mucho amor, mucha atracción, y cuando estaba con ella me sentía seguro", relata.

Afirma que el término de esa relación marcó el inicio de una etapa de descontrol personal, si bien su carrera iba en ascenso.

Ricky admite que ser considerado un sex symbol también le significó una gran presión, aunque cuando entró en sus 30 logró aceptar mejor su orientación sexual. Incluso, señala, llegó a disfrutar la emoción de vivir sus relaciones a escondidas.

"Socialmente hay tantos prejuicios en contra de los homosexuales que yo pensaba que nadie me iba a comprender, que iba a ser rechazado, pues ésos son los códigos que escuché y aprendí de la infancia".

Para el también activista social, fue liberador salir del...

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