Sufragio efectivo... no coacción
| Autor | Guadalupe Irízar |
La preocupación no es nueva. Pero hoy, ante los comicios presidenciales más competidos de la historia reciente, los partidos buscan extremar la vigilancia, mientras la autoridad electoral intenta informar a la ciudadanía de sus derechos y alertarla sobre acciones ilegales que eventualmente podrían modificar la intención de su voto. Para algunos esta práctica ilegal puede modificar el resultado de las elecciones. Para otros su alcance no llega a tanto. Donde no hay duda es en la incidencia directa del fenómeno en la calidad del proceso en marcha y en la legitimidad de las autoridades que emerjan de él.
La compra y coacción del sufragio, así como la presión sobre los votantes, son fenómenos que todo mundo conoce, que pocos pueden documentar, pero que están ahí, latentes, como una amenaza a la competencia equitativa entre los partidos.
La percepción de la magnitud del problema entre los distintos actores y sectores de la sociedad también es variable y pasa también por regiones, estados, distritos así como por el campo y la ciudad.
En lo que hay un aparente consenso es en no quedarse con los brazos cruzados, extremar la vigilancia, no bajar la guardia y promover el conocimiento de todos los ciudadanos de lo que son sus derechos y el modo de hacerlos valer.
Se trata de una movilización para enfrentar al "aparato", como algunos llaman a esa realidad intangible pero presente en algunos procesos electorales, que involucra prácticas inerciales ligadas con el partido y el Gobierno en turno en el poder, el PRI, al corporativismo, y sobre todo a los programas sociales realizados con recursos federales y que involucran a los sectores más vulnerables de la población y de los electores. "Te ayudo para que me apoyes", parece ser el lema.
La inquietud sobre el tema y la movilización de diversos sectores sobre la misma se hizo patente hace poco: el Presidente Ernesto Zedillo alertó en Chiapas sobre los delitos electorales por el condicionamiento del gasto de programas federales de ayuda social.
Asimismo, la Alianza por el Cambio y la Alianza por México denunciaron presuntos apoyos municipales en Cancún, Quintana Roo en favor del candidato priista Francisco Labastida. El PRI en Veracruz presentó la semana pasada una denuncia similar en contra del aspirante de la coalición PAN-PVEM, Vicente Fox.
Pero el debate y las denuncias apenas empiezan.
Los tres Poderes en acción
La situación de alerta y prevención contra estas prácticas ilegales involucra hoy, con el proceso electoral del 2000 en marcha, no sólo a la autoridad electoral, sino también a diversas instancias de los Poderes Ejecutivo...
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