Temen guerra comercial
| Autor | Alfredo González |
De acero puro son los clarines de batalla que empiezan a sonar en los mercados internacionales, al surgir aranceles de 25 por ciento a las importaciones de acero y de 10 por ciento a las de aluminio en el mercado estadounidense.
Líderes de la industria siderúrgica nacional y expertos del sector coinciden en que el mundo enfrenta el mayor riesgo de una "guerra comercial" proteccionista, con cuotas y aranceles al comercio, que nació con la imposición de aranceles a productos siderúrgicos y que tiende a contagiar a otros países e industrias.
Máximo Vedoya Raimondi, presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero), asegura que México no es culpable de la sobreproducción de acero que provoca la invasión de mercados como el estadounidense en condiciones de competencia desleal.
"La industria del acero en México es víctima también y es muy ajena a ese problema que proviene de la sobrecapacidad mundial de acero, que hemos dicho muy claro que la provoca en un 50 por ciento la sobreproducción de China".
Pero el problema no es menor, porque el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha usado como "moneda de cambio" ese arancel a las importaciones siderúrgicas para imponer condiciones en la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC).
"Los aranceles al comercio deben ser independientes a la renegociación del Tratado", considera el líder de los acereros.
EL CONFLICTO
Juan Antonio Reboulen Bernal, director de comercio internacional de Deacero, el mayor fabricante de productos de alambre de acero en México, considera que la industria deberá tener un trabajo de acercamiento con las autoridades de la Secretaría de Economía y de diplomacia comercial altamente sofisticada.
"Enfrentamos el mayor riesgo de una 'guerra comercial' que se haya dado en muchas décadas, tanto por la complejidad de los factores internos como los externos", afirma.
En marzo pasado, el Departamento de Comercio estadounidense impuso aranceles de 25 por ciento al acero y de 10 por ciento al aluminio de importación, pero en declaratoria incluyó una cláusula que pospuso hasta el 1 de mayo pasado su aplicación para México y Canadá, a condición de una buena renegociación del TLC.
También decidió dejar fuera de la aplicación del arancel a la Unión Europea (UE), Australia, Argentina, Brasil y Corea del Sur.
Unas horas antes de su vencimiento, nuevamente amplió el plazo para el 1 de junio próximo, a reserva de que estos países tomen acciones comerciales...
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