Templo Mayor

AutorF. Bartolomé

A PESAR de ser tan fanático del beisbol, a Andrés Manuel López Obrador se le olvidó que el librito dice que cuando el equipo va perdiendo, hay que cambiar la estrategia.

PERO LEJOS de ajustar el juego, AMLO se montó en su macho y -aun contra consejos de sus colaboradores- decretó que la fuerza de su campaña seguirá siendo la "movilización ciudadana" y que su principal estratega seguirá siendo él mismo.

CON ESA línea de acción, López Obrador parece decidido a seguir cometiendo errores como el de confiarse demasiado de su ventaja inicial y el de menospreciar las herramientas del marketing político moderno.

LO PEOR que le puede pasar a cualquier manager de beisbol es pretender negar la realidad de la pizarra -en especial cuando el otro equipo está enrachado y tú no pegas ni un hit-, como lo está haciendo el tabasqueño.

ANTE ESTE panorama, si López Obrador es incapaz de manejar una campaña presidencial, se ve difícil que pueda manejar un país... o un equipo de beisbol.

AL QUE cada vez se le pone más negro el panorama es a Roberto Madrazo.

SEGÚN CUENTAN, los gobernadores priistas no están dispuestos a dejarse arrastrar por el derrumbe de su abanderado presidencial.

DE AHÍ QUE, luego de la reunión que tuvieron los mandatarios tricolores norteños, los tironeos subieron de intensidad y por eso están buscando una solución salomónica.

ES DECIR, que apoyarán a sus respectivos candidatos al Congreso y dejarán que el tabasqueño se rasque con sus propias uñas.

Y EN EL cuartel general de Felipe Calderón no cantan mal las rancheras en eso de los pleitos internos.

DICEN QUE el zipizape entre Jorge Kahwagi y Cibernético fue un...

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