Tolera México altos niveles de smog
| Autor | Emilia Martínez y Mónica Delgado |
Lo que en México se considera calidad del aire "regular", a los franceses les pone los pelos de punta.
El umbral mínimo para que Francia declare precontingencia ambiental es de 50 µg/m³ (microgramos por metro cúbico) de PM10 (partículas finas de contaminantes), mientras que en la Ciudad de México se requieren 214 µg/m³.
Este año, la Ciudad ha registrado en 138 días una concentración de PM10 mayor a 50 µg/m³.
Para la Agencia Europea del Medio Ambiente superar ese umbral es inusual y llegar a 80 µg/m³, como ha pasado últimamente en Francia, es alarmante, por el riesgo que supone para la salud.
La contaminación atmosférica, calificada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el principal riesgo ambiental a la salud pública, es cancerígena y se vincula con enfermedades cardiovasculares y respiratorias.
En concreto, las PM10 agravan el asma y una exposición crónica a altas concentraciones aumenta el riesgo de mortalidad.
Hasta ahora no se ha podido determinar un umbral de contaminantes debajo del cual no haya daños para la salud, razón por la cual la OMS fijó por primera vez, en 2005, un valor de referencia para las PM10 y lo situó en una media de 50 µg/m³ al día, al considerarlo un objetivo alcanzable.
No obstante, reconoce que la mayoría de las ciudades del mundo que monitorean su calidad de aire no han conseguido los niveles de seguridad señalados.
En México, por ejemplo, los límites permisibles para la concentración de PM10 establecidos por la Secretaría de Salud son de 75 µg/m³ como promedio de 24 horas.
Dicha medida, no obstante, no fija el mínimo para decretar precontingencia.
"Normalmente, ése es el límite en el cual estamos rebasando una buena calidad del aire con el límite en el que no es satisfactoria, y en el que muchas personas sensibles podrían tener algún tipo de efecto en la salud", explica Ricardo Torres, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM.
Al rebasar los 75 µg/m³ , añade, se analizan las condiciones meteorológicas para saber si hay posibilidades de que dispersen esa contaminación. Si no las hay, entonces se debe esperar a que marque el mínimo para decretar precontingencia.
"Si se alcanza ese valor, entonces sí la activan, pero mientras, esperan ese colchoncito para ver si las condiciones meteorológicas ayudan a dispersar", aclara el especialista.
Las normas de calidad del aire, explica, por su parte, Sergio Sánchez, director ejecutivo de Clean Air Institute, establecen los límites que no se debieran exceder en ciudades relativamente limpias (como Francia), o los niveles a donde se aspira a llegar en urbes más contaminadas (como el DF).
La Secretaria del Medio Ambiente del DF, Tanya Müller, recuerda que la instancia que fija los límites permisibles de concentración de contaminantes es la Comisión Federal para la Protección contra los Riesgos Sanitarios.
De hecho, apunta, apenas se disminuyó el umbral de concentración de O3 (ozono) de 0.100 ppm (partes por millón) a 0.095 ppm.
En cuanto a PM10 pasó de 120 µg/m³ a 75 µg/m³.
"La Ciudad de México, fue de las entidades que empujó más para reducir esos niveles", afirma Müller.
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