TOLVANERA / La foto

AutorRoberto Zamarripa

El presidente Enrique Peña quisiera imprimir en 3D su par de fotos con el líder cubano Fidel Castro. Darles forma, volumen, sentido. Pero no la tiene fácil.

Diseñó su primera visita a Cuba justo al segundo año de su mandato, igual que Vicente Fox. Pero la obsesión era lograr la fotografía con Fidel Castro. Y logró dos. Una parado, otra sentado.

El pretexto para visitar Cuba era la Segunda Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) realizada en La Habana hace una semana. Tras la Celac vino la visita oficial con el gobierno cubano y en el intermedio la reunión del presidente Peña con Fidel. De esos encuentros no derivó gran cosa. Eran meras señales, gestos.

Para Cuba la cumbre de la Celac representó quizás el encuentro de reconocimiento internacional más importante desde 1999 cuando la Novena Cumbre Iberoamericana. Desde entonces no se organizaba en La Habana una reunión con esa convocatoria. Treinta de los 33 jefes de Estado y de gobierno acudieron a la Celac.

Durante los días de la Cumbre, la presencia policiaca uniformada era ostensible en todos los puntos. Grupos de derechos humanos denunciaron detenciones de dirigentes y bloqueos de comunicaciones. Ahora solo dos gobiernos, el de Sebastián Piñera de Chile y el de Laura Chinchilla de Costa Rica, ambos salientes, tuvieron reuniones con disidentes. El entorno interno fue el mismo. El externo no.

Justo en 1999, cuando la Cumbre Iberoamericana, el presidente Ernesto Zedillo hizo una fuerte crítica en su discurso al régimen cubano a la vez que la canciller Rosario Green tenía un encuentro con disidentes. Hace 12 años, en febrero de 2002, en la visita oficial de Vicente Fox a La Habana, fue concertado otro encuentro con opositores que molestó a Castro y aceleró el deterioro de la relación.

Peña rompió con esos contactos y cumplió con el protocolo.

Para el gobierno mexicano el saldo de prácticamente una quincena de años de enfriamiento ha sido más dañino para México que para Cuba. El acento en la presión política ha disminuido la presencia mexicana en la región y le ha marginado de oportunidades económicas.

En 2002, la comitiva mexicana que encabezó Fox acudió a la planta Energás, cerca de Varadero, donde fueron informados de las exitosas fórmulas de asociación privada-estatal en materia...

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