Toma la belleza el Centro
| Autor | Pilar Gutiérrez, Óscar del Valle y Manuel Durán |
Cautivan 'corazón' del DF
Pilar Gutiérrez
Ayer las calles del Centro Histórico fueron de las quinceañeras.
En un paseo que duró poco más de dos horas, las 400 festejadas del Gobierno del Distrito Federal, hicieron suyas vialidades históricas como Francisco I. Madero y Paseo de la Reforma, así como edificios emblemáticos como el Palacio de Bellas Artes, el Monumento a la Revolución y el Ángel de la Independencia.
La tarde de las quinceañeras, previa a su gran baile en el Auditorio Nacional, era joven: la caminata inició a las 16:00 horas partiendo del edificio del GDF.
Escoltadas por cadetes del Pentatlón Militar, comenzaron a abrirse paso pintando con los colores de sus vestidos los pasillos de los portales en el primer cuadro del Centro Histórico, hasta alcanzar la esquina de Madero.
Los cientos de peatones que por ahí pasaban, con bolsas de compras, helados y hasta bebés en brazos, se hicieron a un lado y dejaron libre el circuito peatonal para las jóvenes. Fueron muchos los que inmediatamente sacaron sus celulares y empezaron a tomarles fotos, otros les aplaudieron y hasta "chulearon".
"Qué bonitas niñas, se ven hermosas con sus vestidos. Me recuerdan a mis XV años, y la fiesta que me hicieron mis papás, pero hubiera dado lo que fuera por tener algo así", comentó Eugenia, espectadora del desfile de las jóvenes.
La primera parada de su recorrido fue en las escalinatas del Palacio de Bellas Artes, donde les tomarían una foto grupal.
Sin embargo, la cantidad de paseantes complicó la organización del acomodo para la inmortalización del recuerdo, y Javier Hidalgo, titular del Instituto de la Juventud, tuvo que pedir al tumulto que despejara el área.
Pese a los 30 minutos que tomó la logística de la foto y la caminata previa, las quinceañeras no perdían el entusiasmo: "¡quinceañeras, quinceañeras!", "mujer joven, mujer con derechos", junto con las porras propias de cada grupo, no dejaban de escucharse.
"Todavía no estoy cansada, estoy muy contenta", comentó Karla, de Chiapas, al tiempo que mostraba los tacones que llevaba puestos, levantando la crinolina de su vestido blanco con plateado.
Para el traslado a su siguiente destino, el Monumento a la Revolución, las jóvenes abordaron autobuses RTP, excepto Yoselin y Jessica, que viajaron en limusina con espacio para sus sillas de ruedas en la cajuela.
"Sí, me ha gustado todo, todavía no estoy nerviosa pero seguro que al llegar al Auditorio sí lo voy a estar", dijo Jessica, quien cumplirá sus 15...
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