'Tomado manejo mejooor'

AutorRicardo Zamora

"Tomado manejo mejooor", es la frase más común que refieren aquellos que bajo los efectos del alcohol se atreven a conducir sus autos y que al mes dejan un promedio de 60 homicidios por hechos de tránsito.

Pero en realidad no es que manejen mejor, sino que el alcohol los desinhibe, pierden algunos temores que sobrios pueden tener.

Leandro Sanjuanero, perito en jefe y supervisor de Hechos de Tránsito de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, indicó en entrevista que de enero a junio de este año han recibido más de 15 mil solicitudes para realizar peritajes, en tanto que en todo el 2002 fueron más de 38 mil.

De las solicitudes recibidas, de enero a agosto, exclusivamente por hechos de tránsito, en 807 de los casos se registraron muertes, es decir, un promedio de 100 al mes; un 60 por ciento de esa cifra son muertes que se relacionan con en consumo de bebidas embriagantes y la velocidad en automóviles.

Las muertes por hechos de tránsito que tiene registradas la PGJDF en el 2003 son 116 en enero; 99 en febrero; 96 en marzo; 106 en abril; 99 en mayo; 98 en junio; 111 en julio, y 82 en agosto, aunque esos no significa que todos ello sean ocasionados por un conductor en estado de ebriedad.

Pedro Estrada, Coordinador de Servicios Periciales, señaló que existe un 5 por ciento de esas muertes que son de transeúntes ebrios, que al cruzar una calle o avenida fueron arrollados.

El consumo de alcohol y la velocidad se convierten en una formula mortal, sobre todo en las noches, que es cuando se registran los accidentes más aparatosos y que dejan más víctimas.

"Al ir conduciendo en estado de ebriedad como que se les quita algo de miedo, van a conducir más rápido, va a hacer cosas que normalmente no hacen, como exceder los límites de velocidad", dijo Sanjuanero.

Manejo, porque si camino me caigo

De acuerdo con estudios, las personas que ingieren bebidas embriagantes entran a diferentes etapas; según el alcohol que tienen en el cuerpo, sus reflejos se vuelven cada vez más lentos.

"Incluso llega el momento en que las personas que ya tomaron mucho no pueden ni hablar, ya no pueden articular correctamente las palabras, aún así se suben a un vehículo y se ponen a manejar, ¿por qué te vas manejando?, les puede uno cuestionar y responden, porque si me voy caminando me caigo.

"Eso es un riesgo, puede ser una persona que no haga una mala maniobra al conducir, pero si se queda dormido...", comentó.

Como si se tratara de una regla, los jóvenes que...

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