Torea su cinta las brechas sociales

AutorMauricio Angel

Las protestas chilenas de 1986 en las calles y hasta un fallido atentado contra el dictador Augusto Pinochet conforman el escenario de Tengo Miedo Torero, pero su director, Rodrigo Sepúlveda, ha notado que no es un filme de carácter histórico, sino casi un retrato del presente.

La película, adaptación del libro homónimo de Pedro Lemebel y en competencia en el Festival de Venecia en las Jornadas de los Autores, se acabó de filmar un par de meses antes del estallido de las protestas en el país.

"En las calles empezaron a aparecer rayados que decían 'Pedro Lemebel está vivo', 'Lemebel es el pueblo' o 'No tengo miedo torero'. Eso me llevó a darme cuenta que algo que podría parecer histórico es completamente actual, político y contingente. Tenemos democracia, en Chile ya no es ilegal la homosexualidad, pero las brechas sociales se mantienen. Hoy en día el pueblo está perdiendo el miedo para salir a las calles por las mismas demandas.

"Sobre todo es una gran historia de amor, pero enlaza con las protestas que se hacen en toda Latinoamérica por la educación libre para todos y gratuita, garantizar la salud, pensiones y libertades sexuales", dijo Sepúlveda, en entrevista telefónica desde Chile.

La película ha tenido tal expectativa en Chile que cuando se anunció el estreno por streaming se vendieron más de 20 mil boletos para seguir la historia de amor del...

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