Trampolín de independencia
| Autor | América Juárez |
Comenzaron como un grupo parroquial dedicado a trabajar con personas que se encontraban en la cárcel y con chavos banda de la zona de Observatorio. En esa época no se imaginaban que tal experiencia les serviría para la importante labor que realizan actualmente, la de atender a niños de la calle.
Valiéndose de la organización comunitaria que ya tenían y la infraestructura con que contaban en la Parroquia, encaminaron sus esfuerzos a diseñar un modelo de atención para este sector.
A diferencia de otras instituciones que trabajan en diferentes zonas de la ciudad, sin tener un punto de pertenencia para los niños que atienden, el grupo buscó, desde que se constituyó como Fundación San Felipe de Jesús hace seis años, concentrarse sólo en el área de Observatorio.
Para enfrentar su nuevo reto, recibieron una intensa capacitación sobre planeación estratégica, sistematización, evaluación de proyectos, recaudación de fondos, dinámicas de grupo, adicciones, aunque todo esto sirvió como herramienta porque la aplicación real no se vislumbra hasta que ya se está trabajando con los "chavos de calle".
La metodología que sigue la Fundación, explica Jorge Arzate, coordinador de la misma, está basada en el juego y se divide en varias etapas: la primera es de ubicación, dónde están los muchachos, cómo viven, a qué juegan, qué comen, a qué le dedican el tiempo... Es un proceso de diagnóstico donde observan el medio ambiente en el que se desarrollan.
Una vez que ya los tienen ubicados, no buscan hacer contacto con ellos, sino que los niños hagan contacto con la Institución. "Si ya sabemos su lugar de reunión, vamos ahí, llevamos una pelota, unas cartas y nos ponemos a jugar entre nosotros, sin hacerles caso. Cuando empiezan a acercarse, tomamos nuestro juego y nos retiramos sin decir nada; la siguiente ocasión se quedan con mayor interés, y así poco a poco, hasta que ellos van demandando y los vamos involucrando en el juego".
Este proceso está basado en el método "Niño a Niño", en donde el eje conductor es el juego como una actividad inherente a la persona e imprescindible en la vida de los niños, cuyas experiencias se recogen en el libro "Jugando en serio", elaborado por la Fundación San Felipe de Jesús y Ednica.
Después de este primer acercamiento, conforme pasa el tiempo se van cambiando los roles y los juegos se acompañan de pequeñas reflexiones sobre la vida que llevan los niños en la calle.
"Los jóvenes tienen condiciones en la calle que no les permiten ser...
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