Valen su peso en patrocinios
| Autor | Adrián Basilio |
Unos 10 años atrás tenían que buscarlos y casi siempre recibían negativas. Hoy, como consecuencia de sus resultados en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 y competencias posteriores, una deportista amateur como Ana Guevara puede presumir que casi 10 empresas la patrocinan y que tiene a otras en lista de espera.
Ana, campeona de la Copa del Mundo en los 400 metros y una de las once mejores corredoras de su prueba en toda la historia, es actualmente la atleta mexicana con más patrocinadores, e incluso puede darse el lujo de competir con el futbolista Oscar Pérez y el piloto Adrián Fernández, por mencionar algunos, en la firma de contratos publicitarios. A los tres los patrocinan siete empresas, entre mexicanas y trasnacionales, aunque se desconoce el monto de sus ingresos.
"Creo que todo es parte del proceso, y conforme pase el tiempo y nos acerquemos más a los Juegos Olímpicos, esto (de los patrocinios) tomará más forma", expresa Ana. "Tengo algunos patrocinadores en lista de espera, y no los hemos tomado por falta de tiempo. Además, prefiero seguir obteniendo resultados y paulatinamente ir ganando en patrocinios, pero no dándoles prioridad.
"Algunos de los contratos terminan a mediados del 2003 y entonces habrá oportunidad de vaciar un poco la bandeja y tomar otros, o retomar esos mismos. Es bueno tener muchos patrocinios, pero tampoco se debe caer en excesos", añade la ganadora de la Liga de Oro en el 2002.
Al igual que la mayoría de los deportistas amateurs en los inicios de sus carreras, la sonorense, quien empezó a dar de qué hablar por sus medallas en los Juegos Centroamericanos de Maracaibo 98 y en el Iberoamericano de Atletismo del mismo año, no tenía entonces más apoyo que el otorgado por la Comisión Nacional del Deporte y después de Proexcel, empresa dedicada a canalizar recursos a atletas de alto rendimiento desde principios de la década de los 90.
Con excepción de algunos atletas como el también velocista Alejandro Cárdenas, quien contaba con el respaldo de Bital y Nike, o el andarín Daniel García, de Toks, la mayoría dependían únicamente de lo otorgado por las autoridades nacionales o de Proexcel.
La entrada en funciones del programa CIMA, fideicomiso creado con recursos de la iniciativa privada y el Gobierno Federal para apoyar a los mejores atletas del país con miras a Sydney 2000, y los resultados en esos Juegos Olímpicos, influyeron para que los deportistas mexicanos de excelencia tuvieran becas económicas más elevadas y...
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