Tiempo de Negocios / Vislumbra Wärtsilä potencial para cogenerar electricidad en México; en cartera varios proyectos
| Autor | Darío Celis Estrada |
Le dábamos cuenta el martes de la visita del CEO de Wärtsilä, Ole Johansson. Viene con un nutrido grupo de ejecutivos. Ese mismo día se entrevistó con Felipe Calderón y el subsecretario de Política Energética, Héctor Moreyra.
También con el titular de Economía Fernando Canales, el subdirector de Finanzas de la CFE Eugenio Laris y el director corporativo de Planeación Estratégica de Pemex Roberto Ocegueda. Ayer estuvo con el director de la LyFC Luis de Pablo.
Wärtsilä es una compañía finlandesa con más de 170 años de vida. Cotiza en la bolsa de Helsinki. El valor de sus títulos en circulación asciende a mil 300 millones de dólares, aunque la empresa está valuada en tres mil millones.
Un tercio de sus ingresos están en Asia, otro porcentaje igual en Europa y otro tanto en las Américas. Da empleo a más de 12 mil personas en 65 países y llegó aquí a mediados de los 60, aunque su primer oficina local la abrió en 1996.
Dos son sus líneas de negocios: la producción de motores para la propulsión de barcos y la construcción de plantas de generación eléctrica. Cada una representa ingresos anuales promedio de mil millones de dólares.
En el primer rubro son líderes indiscutibles, ya que de cada cinco barcos que surcan los mares del mundo uno es cliente de Wärtsilä. Aquí hablamos desde grandes contenedores hasta buque tanques pasando por cruceros turísticos.
México no es la excepción. Desde hace tiempo trabajan para Pemex que dirige Raúl Muñoz Leos, TMM que preside José Serrano, Exportadora de Sal que lleva Juan Ignacio Brener y Grupo Protexa de los hermanos Javier y Humberto Lobo.
Por lo que hace a la división de generación de electricidad, que encabeza Pekka Ahlqvist, también de visita en nuestro País, Wärtsilä es un jugador relevante a nivel global. Tiene hoy día una capacidad de 127 mil megawatts.
De ellos 100 mil están concentrados en su división marina y el resto en plantas diseminadas por todo el planeta. La principal ventaja sobre sus competidores es que son muy flexibles en cuanto al uso de insumos para su generación.
Lo óptimo es el gas natural, pero también emplean combustibles pesados como los residuales que se obtienen de la refinación, combustóleo, diesel e incluso crudo. Su nicho de mercado se sitúa debajo de los 200 megawatts.
Aquí en México arrancaron en el 2000 una planta de 25 megawatts. Está en Cozumel y puede crecer a 30. También acaban de entregarle una a Nestlé, que preside Eugenio Minvielle, para autoconsumo de 2.3 megawatts en...
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