Vuelven escolares con sus familiares

AutorIsmael López

MANAGUA.- Los estudiantes atrincherados desde mayo en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua finalmente pudieron volver a casa ayer.

Luego de ser desalojados por la fuerza por las huestes del Presidente Daniel Ortega y obligados a refugiarse en una iglesia cercana al campus, un poco más de 220 escolares se reunieron con sus familiares.

Para lograrlo, sin embargo, fueron necesarias 18 horas de enfrentamientos que iniciaron la tarde del viernes.

Tropas de civiles leales a Ortega y fuertemente armados atacaban con balazos a los estudiantes, mientras que estos defendían sus trincheras con armas caseras, morteros, piedras, palos y bombas molotov.

Los enfrentamientos dejaron dos universitarios muertos y 12 heridos, algunos de gravedad.

Los jóvenes demandaban justicia por más de 300 muertes desde que iniciaron las protestas contra el Presidente, el 18 de abril -cuando intentó reformar la seguridad social-, y elecciones anticipadas.

El viernes, cuando ya no pudieron defender sus posiciones se refugiaron en la iglesia Jesús de la Divina Misericordia, cercana a la UNAN, donde fueron sitiados por las tropas de Ortega. No permitían a nadie entrar ni salir de las cercanías del recinto, ni siquiera a los servicios médicos.

Las ráfagas contra la iglesia y la casa cural donde se resguardaban junto a periodistas a ras del piso, fueron interminables.

"Nos quieren matar, si lo que querían era que abandonáramos la universidad por qué ahora no nos dejan salir", dijo a REFORMA Harold Sotomayor, estudiante de geografía que se encontraba dentro del recinto eclesial.

Finalmente, el nuncio Waldemar Stanislaw Sommertag y el cardenal Leopoldo Brenes negociaron con el Gobierno y evacuaron a los universitarios hacia la catedral metropolitana de Managua, donde los...

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