¿Cambia Sotana por revólver?
| Autor | Liliana Lejarazu |
Ha cobrado fama en la televisión hablando de valores y moral, pero ahora el Padre José de Jesús Aguilar deja colgada la sotana para convertirse en asaltante.
Pero que nadie se preocupe, pues tan radical cambio obedece a los requerimientos de su clase en El Set, la escuela de actuación de Luis Felipe Tovar, adonde el sacerdote ingresó hace casi dos meses.
En la primera lección que le tocó en el horario nocturno con Tovar como maestro, los oídos del sacerdote tuvieron que adaptarse a las palabras altisonantes que el actor soltaba.
"¡Ándale, Jorgito, chingá!", apresuraba Tovar a uno de sus alumnos antes de comenzar una escena.
Aguilar parecía no incomodarse con la situación: sólo sonreía o a veces soltaba una franca carcajada.
Cuando se repartieron los personajes a interpretar, al sacerdote le tocó hacerla de desempleado, mientras que Jorgito, un chico de 25 años, le correspondió ser un empresario.
Ambos tuvieron menos de 20 minutos para preparar su diálogo, pero el Padre se dio tiempo para echarse una platicadita con uno de sus compañeros: Omar Chaparro.
Ahora sí, listos o no, Tovar llamó a Jorgito y a Aguilar para ocupar sus posiciones en torno de un escritorio, donde leyeron primero el texto.
Cuando llegó el momento de la verdad, el religioso resultó alumno de estrellita en la frente, pues aunque debía decir algunas groserías, compañeros y profesor le aplaudieron la manera tan natural en que le salieron.
"¡Me parece increíble que en este pinche País no haya una sola ley para los desempleados!", decía el guión, pero el Padre le puso de su cosecha para que le saliera mejor.
Así que acabó diciendo: "¡Me parece increíble que en este pinche País no haya una sola ley para los desempleados, pinche escuincle mión!".
Pero ahí no quedó la demostración de histrionismo de Aguilar, quien tomó un revólver para asaltar al personaje de Jorgito, y otra vez usó el lenguaje florido que se ameritaba.
"¿Sabes cuánta gente hace esto diario (asaltar) y hay una ley que los protege? ¡Dame todo lo que tengas, cabrón!", dijo.
Sin embargo, el sacerdote aclaró que en la vida real nunca aceptaría interpretar a un personaje que atentara contra la moral.
"Mi trabajo tendría que ser para ayudar a difundir valores, y si se puede...
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