Tienen en Yucatán sacerdotes polémicos

AutorMartín Morita

Corresponsal

CHABLEKAL.- Polémicos por su profunda dedicación a la defensa de los derechos humanos y a lo que denominan "pastoral de campo e indígena", los sacerdotes Raúl Lugo Rodríguez, Atilano Ceballos Loeza y Augusto Romero Sabido se definen como clérigos atípicos.

Sin embargo, Lugo Rodríguez, cabeza de ese pequeño grupo de religiosos, afirma en entrevista: "somos sacerdotes en toda la regla que marca el Vaticano".

Etiquetados como "curas rebeldes" por grupos conservadores de la Iglesia y de la sociedad yucateca, Lugo Rodríguez aclara que sólo buscan apoyar a los más desprotegidos.

"Hemos asumido una vocación de estar más de cerca con los indígenas, de defender sus derechos humanos, de promover proyectos agropecuarios y educativos entre las clases más desprotegidas, pero sin deslindarnos de nuestro deber como curas, de impartir misas", relata.

De la vertiente "pastoral de campo e indígena", Lugo Rodríguez habla de los alcances que han logrado a través de una organización llamada Red Campesina Peninsular de Comercio Justo, cuyo lema es "tojil yambil", palabras mayas que significan "intercambio justo".

La base de este proyecto productivo está en La Escuela de Agricultura Ecológica "U Yits Ka'an" (Savia del Cielo), ubicada en Maní.

"Se trata de una institución educativa para el medio rural regional que se ha consolidado y adaptado la forma de asociación civil, y ha logrado ganarse una importante presencia regional", explica el sacerdote.

La fundación de la Iglesia católica alemana Misereor y el gobierno de Yucatán son las principales fuentes de financiamiento para la escuela, con cuyas aportaciones se cubren comidas, mantenimiento y otros gastos.

Un patronato integrado por diversas personas a título individual, principalmente de la sociedad meridana, organiza conciertos y diversas actividades para colaborar financieramente con la escuela.

Además, el Centro Regional de Chapingo en la península, la Universidad de Yucatán y APIS aportan los profesores y algunos materiales, tanto para los cursos como para las reuniones del consejo directivo de la escuela y de las academias, y las evaluaciones semestral y anual.

"Los cursos-talleres que se imparten abarcan una buena gama de elementos y cuestiones técnicas de la agricultura ecológica, pero también elementos sociales, humanísticos y éticos, buscando una formación integral, equilibrada, formativa y liberadora, para contribuir a la formación de agentes sociales de cambio comunitario rural", precisa...

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