Entrevista / Zahi Hawass / 'Me suelen comparar con Indiana Jones'

AutorAntimio Cruz

Después de dedicar 35 años a la exploración del antiguo Egipto y haber rescatado más de 254 momias, Zahi Hawass, secretario general del Supremo Consejo de Antigüedades de Egipto, afirma en entrevista haber encontrado la momia más antigua del mundo, un cadáver femenino de 5 mil años preservado en una tumba sellada en Saqqar, al sur de El Cairo.

El egiptólogo, de visita en México para participar hoy y el domingo en el primer foro Dos mundos del ayer juntos hoy: el mundo egipcio y el mundo maya, sonríe al recordar que la revista National Geographic le atribuyó el sobrenombre del "cazador de momias".

"El motor principal de la arqueología no es el interés científico ni el deseo de responder interrogantes de la historia -que desde luego existen-; lo más estimulante es la aventura", dice quien ha descubierto más tumbas y momias que ningún otro arqueólogo.

"Sé que mi vida es una aventura real cuando entro en cámaras mortuorias o recorro túneles localizados 15 metros bajo tierra y hago un descubrimiento. Eso es gratificante y es quizá lo que hace que tantos amemos la arqueología".

Canoso, de piel tostada y constitución atlética, el experto de 56 años de edad subraya que los enigmas del antiguo Egipto no se agotan. Como ejemplo está la momia de 5 mil años encontrada en abril y fechada hace un mes.

"Hallamos dos tumbas selladas y me tocó abrir la primera. Al hacerlo, me gustó sentir el aire de la tumba cerrada que salía, mientras una corriente de aire fresco ocupaba su lugar, protegiéndonos de cualquier infección que pudiera estar contenida ahí".

En la cámara mortuoria había un esqueleto cubierto de lino, tela usada en los primeros procesos de conservación, pero en la segunda cámara encontraron un entierro más complejo, que incluía un sarcófago de cedro del Líbano y un esqueleto de 5 mil años, con el proceso de momificación que utilizaron las generaciones posteriores.

¿Siempre quiso ser arqueólogo?

Cuando era joven no tenía ningún interés en serlo, quería convertirme en abogado y comencé a estudiar esa carrera en la Universidad de Alejandría. Pero la realidad es que al cabo de un mes me di cuenta de que no me interesaban las leyes y pedí mi cambio. Comencé a estudiar arqueología, pero incluso después de graduarme no me apasionaba. Cuando cumplí 21 años entré a trabajar como arqueólogo en el gobierno y me enviaron a una misión. En mi primera semana de trabajo encontré una tumba y dentro una estatua. Usando una brocha para limpiar esa reliquia, mi...

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