Colaborador Invitado / Daniel Vázquez y Ana Paula Hernández: Guatemala: los juicios por venir

AutorColaborador Invitado

FLACSO-México / Fondo para los Derechos Humanos Mundiales.

Recientemente en Guatemala una corte local condenó a 80 años de prisión a Efraín Ríos Montt, presidente de facto (1982-1983), quien además ocupó el cargo de ministro de Defensa y dictaba las órdenes al Ejército. El dato de la sentencia ha dado muchas vueltas al mundo, pero poco se ha hablado del trabajo que hubo detrás de ella y de la descomposición social que impera hoy en Guatemala.

Un aspecto a subrayar es el trabajo conjunto entre la sociedad civil y el Ministerio Público en la elaboración de la denuncia, cosa impensable en países como México. Hubo un trabajo de investigación y documentación de más de 10 años por la Asociación para la Justicia y la Reconciliación (AJR) y el Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos (CALDH), quienes conjuntamente con el Ministerio Público (en particular en años recientes con la fiscal general Claudia Paz, quien ha jugado un papel clave para lograr que crímenes del pasado se juzguen por cortes locales en Guatemala) realizaron un trabajo riguroso y valiente para recabar las pruebas y formular una estrategia integral que contempló cientos de testimonios, peritajes antropológicos, culturales, psicosociales, de expertos en mando militar y Fuerzas Armadas, así como la comprobación de que el racismo fue la base del genocidio en contra del pueblo Ixil.

Pero no sólo vemos un intenso e inesperado papel de los ministerios públicos. También los jueces que presidieron el Tribunal mostraron una gran valentía y compromiso con el Estado de derecho, al mantenerse firmes frente a múltiples ataques en su contra, incluyendo demandas formales por abuso de autoridad y violación de la Constitución, y numerosos intentos por parte de la defensa de Ríos Montt y Rodríguez Sánchez por dilatar, suspender y anular el juicio. Sobresale la jueza que presidió el Tribunal, Jazmín Barrios, quien además de este juicio ha participado en cuatro de los procesos más emblemáticos de derechos humanos en Guatemala: el asesinato del obispo Juan Gerardi, el asesinato de la activista Myrna Mack, y las masacres de Dos Erres y Plan de Sánchez. En todos los casos se han dictado sentencias históricas condenatorias en contra de miembros de las Fuerzas Armadas.

Sin embargo, aún falta mucho por venir en la lucha por la verdad, justicia y reparación de las víctimas de la dictadura en Guatemala. De entrada, el juicio permitió observar los enclaves autoritarios que toman forma en organizaciones...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR